Pence: «No permitiremos que Corea del Norte secuestre la imagen de los JJOO»
EFE
El vicepresidente de EEUU, Mike Pence, dijo que este país «no permitirá que la propaganda norcoreana secuestre la imagen y el mensaje de los Juegos Olímpicos», antes de asistir el próximo viernes a la ceremonia de apertura en PyeongChang (Corea del Sur).
«No permitiremos que (Corea del Norte) esconda tras la bandera olímpica la realidad de que esclavizan a su población y amenazan a otros países», afirmó Pence en una rueda de prensa en Tokio tras reunirse con el primer ministro japonés, Shinzo Abe.
Pence se encuentra en viaje oficial en Japón antes de desplazarse a Corea del Sur para acudir a la ceremonia apertura de los Juegos Olímpicos de invierno, donde desfilarán juntos los atletas del Norte y el Sur, y a la que asistirá también una delegación de alto nivel enviada por el régimen de Kim Jong-un.
«Estaré allí para animar a nuestros atletas, pero también para permanecer junto a nuestros aliados y para recordar al mundo que el régimen norcoreano es el más tiránico y opresivo del planeta», afirmó Pence.
El «número dos» de la Casa Blanca también aprovechó la ocasión para anunciar que Estados Unidos aplicará una nueva ronda de sanciones económicas contra Corea del Norte, «las más duras y agresivas hasta la fecha» y destinadas a poner fin a sus programas armamentísticos.
Estas nuevas medidas punitivas «serán desveladas próximamente» y están dirigidas «a continuar aislando a Corea del norte hasta que abandone de una vez por todas sus programas nuclear y de misiles», afirmó Pence, quien no dio más detalles de las sanciones adicionales que planea Washington.
El vicepresidente reiteró la estrategia frente a Pyongyang de la Administración que lidera Donald Trump, basada en «no repetir los errores del pasado» con el hermético régimen, en «intensificar la presión» sobre el mismo y en «mantener abiertas todas las opciones».
Su viaje a Japón y Corea del Sur llega marcado por el ambiente de distensión entre Seúl y el régimen que lidera Kim Jong-un con motivo de la cita olímpica, y en medio de especulaciones sobre posibles encuentros en el marco del evento entre la delegación norcoreana y responsables surcoreanos e incluso con el propio Pence.