Pasaporte venezolano: Una misión casi imposible para los que viven en el exterior
Agencias
El pasaporte venezolano de Jhineska Aldana, de 25 años y residente en Atlanta, venció en diciembre del 2018. Seis meses antes de la fecha de expiración, comenzó a preocuparse y desesperada intentó varias veces obtener una cita a través de internet, pero no lo logró.
Y aunque Aldana sigue intentando que el Servicio Administrativo de Identificación, Migración y Extranjería (SAIME) de Venezuela le fije una cita, sus esfuerzos son en vano porque el portal no funciona.
Vanessa López, venezolana residente en Miami y maestra de una escuela primaria, lleva dos años esperando la renovación de su pasaporte. La última vez que revisó la página web del SAIME, su trámite estaba “en proceso”.
Además del problema con la página de internet de SAIME, los consulados venezolanos en Estados Unidos, siete en total, están cerrados.
Nicolás Maduro ordenó la reapertura de la sede en Brickell para las elecciones presidenciales del 20 de mayo de 2018. Pero el 24 de enero de 2019 Maduro anunció que rompía relaciones diplomáticas con Estados Unidos y el cierre de la embajada y todos los consulados en este país. El de Miami lo volvieron a cerrar.
María Gabriela Gómez, una joven venezolana que vive en Missouri, tuvo que viajar a Venezuela para renovar su pasaporte porque en el consulado de Chicago, que era el que le quedaba más cerca, no le garantizaban que pudieran prorrogarlo en menos de un año. Ella tiene visa de estudiante en Estados Unidos, pero para sacar su permiso para trabajar debía tener un pasaporte vigente.
Según Gómez, a pesar de la situación actual del país, no había otra forma de obtener su prórroga.
En los últimos años, más de 3.3 millones de venezolanos han emigrado a otros países. Una gran parte residen en Colombia y Perú, de acuerdo con cifras de la ONU. Muchos de ellos confrontan problemas para renovar su pasaporte y otros documentos en las sedes diplomáticas de Venezuela y tienen que esperar años para ello, según testimonios recogidos y expertos consultados por el Nuevo Herald.
El portal del SAIME mantiene activa la opción de pedir una cita en estas oficinas, pero en ninguna de las sedes diplomáticas nadie respondió a repetidas llamadas telefónicas de el Nuevo Herald.