Paraguay aboga por aislar a Maduro hasta que renuncie a seguir en el poder
EFE
El ministro de Relaciones Exteriores de Paraguay, Luis Alberto Castiglioni, aseguró este viernes que el Gobierno de su país aboga por aislar «absolutamente» a Nicolás Maduro hasta que renuncie a mantenerse en el poder «a costa del sufrimiento de sus compatriotas».
«Para nosotros es un usurpador que está haciendo sufrir atrozmente a su pueblo», dijo Castiglioni a los periodistas tras la reunión que mantuvo hoy con su homólogo español, Josep Borrell, en Madrid.
Según el ministro, su país, ha tenido «una actitud bien clara y contundente en relación al régimen de Maduro».
«No hemos reconocido la legitimidad de las elecciones, el resultado no está revestido de legalidad y por lo tanto hemos reconocido a este Gobierno emergente», dijo refiriéndose a Juan Guaidó, que hoy se encuentra de visita en Paraguay.
Castiglioni recordó que el 10 de enero, mientras Maduro tomaba posesión del Gobierno, «Paraguay, en ese momento, rompía relaciones diplomáticas con Venezuela».
Paraguay forma parte del Grupo de Lima, el foro de países americanos que exige la salida de Maduro y que el lunes celebró una reunión en Bogotá, en la que se comprometió a continuar trabajando por la «redemocratización» de Venezuela, ofreció un amplio respaldo a Guaidó y volvió a rechazar la posibilidad de una intervención militar.
«Para nosotros el señor Maduro no tiene voluntad política absolutamente de dialogar y si tiene un tipo de actitud en ese sentido en algún momento, solo lo hace con la intención de mantenerse en el poder», dijo.
Castiglioni también subrayó la «tragedia humanitaria» que constituyen los 3.500.000 venezolanos que han tenido que salir de su país. «Es un éxodo que nunca vimos en Latinoamérica», remarcó.
Por su parte, Borrell recordó que toda acción española con respecto a Venezuela se desarrolla «en el marco de la Unión Europea», si bien España «tiene un liderazgo» en los temas de ese país.
«Nosotros reconocimos como presidente interino al señor Guaidó con una misión concreta que es la de convocar elecciones, y ese sigue siendo el objetivo», afirmó.
En todo caso, Borrell reiteró la «absoluta oposición» del Gobierno español de que la solución para Venezuela sea una intervención militar.
«La experiencia histórica nos dice que las intervenciones militares extranjeras no sirven ni para democratizar un país ni para estabilizarlo políticamente», concluyó.