Panamá registra 59 defunciones por COVID-19 y alcanza los 2.249 contagios
EFE
Panamá sumó 4 muertes más por el COVID-19 y llegó a 59 defunciones, además de 149 nuevos casos de la enfermedad para un acumulado de 2.249 contagios confirmados, informaron este martes las autoridades de salud.
En la entrega diaria de datos se explicó que 1.906 pacientes están en aislamiento domiciliario por presentar síntomas leves, 379 de ellos en hoteles que funcionan como hospitales transitorios.
Han sido hospitalizados 269 pacientes, 177 en salas y 91 en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI), mientras que se añadieron dos nuevos recuperados a los 14 hasta ahora restablecidos.
En cuanto a las pruebas de detección de contagio por COVID-19, se informó que se han efectuado 10.681 pruebas, 467 en las últimas 24 horas, con 78 % negativas y 22 % positivas.
El director de la Caja de Seguro Social, Enrique Lau, dijo que esta entidad sigue coordinando con el Ministerio de Salud (Minsa) la atención de esta crisis sanitaria, para lo cual, detalló, dispone de 2.800 camas de hospitales a nivel nacional, más de 227 camas en cuidados intensivos y más de 200 ventiladores.
«Estamos prestos para continuar luchando para preservar la vida de los panameños», afirmó Lau, que la semana pasada advirtió que la UCI estaba rebasando su capacidad de albergar pacientes.
Las autoridades exhortaron nuevamente a la población a cumplir con las medidas sanitarias, que principalmente pasan por quedarse en casa, al dar cuenta de que en las últimas 24 horas fueron retenidas 797 personas no cumplir el confinamiento.
El 25 de marzo, el Ejecutivo ordenó una cuarentena nacional indefinida reforzada desde el pasado miércoles con más restricciones, basadas en el género de la población, que estarán vigentes durante 15 días y que busca sacar de las calles al 50 % de la gente cada día.
El país está semiparalizado desde mediados de marzo, cuando se ordenó el cierre de los comercios no esenciales, se suspendieron las clases y se prohibieron las aglomeraciones de personas.
«Quédense en su casa. ¿Qué es lo que no entienden de quedarse en su casa?», volvió a preguntarse este martes el presidente panameño, Laurentino Cortizo, refiriéndose a ese sector de la población, minoritario, que continúa violando el confinamiento obligatorio.
El mandatario reconoció que su país aún no ha llegado al pico de la pandemia y que vienen semanas difíciles porque abril es un mes «crítico», pero que siente que las medidas y en general el país van «por buen camino».
Cortizo llamó a la población a tener mantener la serenidad porque tanto la crisis sanitaria como la social y económica que trae aparejada será prolongada, y apeló nuevamente a la solidaridad de todos.
La Administración de Cortizo ya ha puesto en marcha programas de emergencia de transferencias monetarias y distribución de alimentos en los sectores más pobres, aprobado una rebaja temporal del costo de la energía y alcanzado un acuerdo con la banca para una moratoria de tres meses en los préstamos de auto, vivienda y tarjetas de crédito, entre otros.
El Gobierno está reprogramando el presupuesto para acceder a 2.000 millones de dólares y también recabó otros 2.500 millones en los mercados de deuda, entre otras medidas para conseguir dinero que le permita afrontar la emergencia.