Países del G7 abordarán cómo luchar contra contenidos terroristas en la red
EFE
La lucha contra la difusión de contenidos terroristas a través de internet será uno de los temas centrales del próximo G7 que tendrá lugar en la ciudad francesa de Biarritz a finales de agosto y será debatida a partir de mañana en París por los ministros del Interior de los países miembros.
Francia, que preside ese grupo desde enero pasado, quiere implicar en este asunto a los gigantes de la red, los llamados GAFA (Google, Apple, Facebook y Amazon), algunos de los cuales estarán invitados al encuentro de los ministros.
Las imágenes del reciente atentado racista de Christchurch en Nueva Zelanda, atribuido a un militante de extrema derecha, han mostrado que internet no es solo utilizado por grupos terroristas de ideología islamista y que no se reacciona suficientemente para detener su difusión a través de la red, según fuentes gubernamentales francesas.
Por ello, señalan, es preciso profundizar en la coordinación y, sobre todo, implicar a los GAFA.
Mientras Estados Unidos, país de procedencia de la mayor parte de los gigantes de internet, apuesta por incitarlos a retirar esos contenidos, Francia y los otros miembros europeos del G7 (Alemania y Reino Unido) prefieren que haya una legislación que los obligue a hacerlo.
En ese sentido va la propuesta de la Comisión Europea, debatida actualmente en el Parlamento Europeo, preocupado por el riesgo que puede suponer esa legislación sobre la libertad de expresión.
Más allá de esas diferencias, los ministros debatirán sobre la forma de combatir los contenidos terroristas en internet y sobre el uso que estos grupos hacen de las redes para comunicarse y para reivindicar sus acciones.
Además, afrontarán la obligatoriedad de retirar esos contenidos de los servidores y estudiarán un sistema para identificarlos, una especie de «código de barras», lo que facilitará su bloqueo, además de la forma de promover contenidos positivos alternativos para contrarrestar sus mensajes.
Junto al combate en internet, los ministros debatirán también sobre el retorno de los excombatientes extranjeros del Estado Islámico, una vez que este grupo terrorista ha perdido su último bastión territorial en Siria.
En ese punto, mientras que Washington apuesta por que cada país repatríe a sus nacionales para juzgarles, París prefiere que sean procesados en la región.
En cualquier caso, todos coinciden en la necesidad de gestionar el caso para evitar que vuelvan de forma desordenada, con el consiguiente riesgo en sus países de origen, o que se reagrupen en otras regiones, como el Sahel o Yemen.
La inmigración será otro de los asuntos espinosos, con especial atención a la lucha contra las redes de tráfico de migrantes, tanto en el Mediterráneo como en la frontera sur de Estados Unidos.
Los ministros debatirán modalidades de ayuda a los países de origen y de tránsito en la desarticulación de esas redes.
La Presidencia francesa del G7 también ha introducido en la reunión una reflexión sobre la lucha contra la criminalidad ecológica, con especial atención a la deforestación irregular, el tráfico de deshechos o la protección de flora y fauna amenazadas.
