Opositores panameños critican por “contradictoria” la exigencia de visa a venezolanos
Agencias
La exigencia de visa estampada a los venezolanos a partir del 1 de octubre próximo anunciada ayer por el Gobierno de Panamá fue criticada por opositores panameños, que consideraron la medida como contradictoria e incomprensible.
El presidente panameño, Juan Carlos Varela, dijo en cadena nacional que la exigencia de visa a los venezolanos se mantendrá “hasta que se recupere el orden democrático, se restablezca la Constitución y se respeten los derechos humanos en Venezuela”.
Lo que Varela está haciendo, según Cochez, “es simplemente ponerle límites a los venezolanos cuando él dijo que Panamá sería solidario con ellos”.
“Para ser solidario con los venezolanos no hay que ponerle límites para que vengan a Panamá”, afirmó el exdiplomático, quien fue embajador ante la OEA hasta enero de 2013, cuando el Ejecutivode Ricardo Martinelli (2009-2014) lo destituyó por criticar la situación venezolana.
Cochez insistió en que la medida es contradictoria, lo que se suma al hecho, indicó, de que “Panamá desafortunadamente no tiene una política migratoria”.
Esta falta de una política migratoria, destacó, lo demuestra “la no atención a cien cubanos (migrantes) que están aquí y que los quieren devolver a Cuba”, y ahora también “están poniéndole límites a los venezolanos”.
Por su parte, la excandidata presidencial del opositor Partido Revolucionario Democrático (PRD) Balbina Herrera, coincidió con Cochez acerca de la ausencia de una política migratoria “coherente”, al tiempo que dijo no entender la “justificación” o el “objetivo” de la visa para los venezolanos.
“No entiendo la justificación, eso (el problema migratorio) venía dándose ya”, indicó Herrera, y señaló que “en Panamá no sabemos todavía a ciencia cierta cuántos venezolanos hay”.
Herrera añadió que a Panamá han llegado no solo venezolanos, sino “oleadas de personas extranjeras sin que exista una política migratoria coherente”.
“Entonces creo que es allí donde nosotros tenemos que resolver el problema, no con parches ocasionales, sino que establezcamos una política migratoria en la que todos sepamos cuáles son las reglas del juego para llegar a Panamá”, remarcó Herrera.
Varela argumentó este martes al anunciar la imposición del visado que en los últimos 6 años han llegado al país cerca de 60.000 venezolanos “que buscan un mejor futuro para ellos y sus familias”.
“Son medidas difíciles, pero la situación en Venezuela ha empeorado debido a la decisión de la Asamblea Nacional Constituyente de disolver la Asamblea Nacional Venezolana, irrespetando los principios democráticos, la paz social y actuando contra la voz del pueblo”, aseguró el mandatario.
Varela también indicó que su Gobierno, “consecuente con nuestro compromiso de solidaridad y trato humanitario”, otorgará estatus migratorio a los 25.000 venezolanos que fueron “debidamente censados” hasta el 30 de junio de 2017.
La semana pasada Varela había adelantado, flanqueado por el vicepresidente de Estados Unidos, Michael Pence, que en los próximos días anunciaría “medidas que respaldan el retorno al orden democrático a Venezuela y fortalecen la seguridad interna” del país centroamericano.