Oposición venezolana menos optimista en vísperas de diálogo con el chavismo
EFE
La oposición venezolana se mostró este miércoles menos optimista sobre los logros que puedan obtenerse en las conversaciones que mantiene con el Gobierno de Nicolás Maduro, un proceso de diálogo político que se reanudará mañana en República Dominicana y del que se espera surjan acuerdos en 48 horas.
El partido opositor Voluntad Popular (VP) de Leopoldo López, una de las organizaciones políticas que participa en las conversaciones con el chavismo, consideró este miércoles que la posible negociación «pareciera» encaminada a la infertilidad.
Los diálogos «parecieran indicar que no vamos a poder avanzar en esa supuesta negociación», advirtió el diputado de la bancada naranja Juan Andrés Mejía en rueda de prensa, y responsabilizó de esta situación a los interlocutores de la llamada revolución bolivariana.
«Vamos a una negociación con la intención de nuestra parte de que hay que hacer todo lo que esté en nuestro alcance (…) para conseguir una solución al pueblo, pero quienes están en (el palacio presidencial de) Miraflores no quieren reconocer el desastre en el que estamos todos los venezolanos», prosiguió.
Por ello, Mejía adelantó que si «esta negociación fracasa» el partido de López estará en «la calle defendiendo los derechos de la gente», aunque dijo esperar que las partes logren acuerdos en Santo Domingo.
Alertó de que desde VP no seguirán acompañando «eternamente un proceso que no de resultados al pueblo» y no suscribirán acuerdos que signifiquen «una especie de claudicación a nuestra lucha».
En este sentido, señaló que esperan una «disposición real» de las partes «corroborada por los observadores» del proceso de que este año se convocarán presidenciales «con condiciones claras, con reglas conocidas por todos los actores» y, además, se de una «respuesta a la crisis humanitaria» que la oposición asegura que azota Venezuela.
Sobre si desde VP se ha consultado a la coalición opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD), de la que forma parte, sobre su decisión, dijo que en este organismo «siempre» se ha favorecido «dejar a un lado las diferencias y buscar los puntos en común».
«Lo que no vamos a hacer es aceptar la sumisión, aceptar el chantaje, las presiones que intentan ejercer para que nosotros convalidemos una farsa electoral» que pareciera estar planteada como unos comicios que «pretenden convocar en cuestión de semanas», afirmó Mejía.
El chavismo, por su parte, no ofreció hoy declaraciones sobre este proceso de diálogo del que se ha tomado todo el mérito al considerar una «victoria de paz» las conversaciones entre las fuerzas políticas y luego de la oleada de protestas antigubernamentales del año pasado que se saldaron con más de 120 muertos.
En las conversaciones el oficialismo reclama el reconocimiento de la Asamblea Constituyente, un órgano plenipotenciario compuesto solo por oficialistas, convocado por orden de Maduro y que la oposición considera fraudulento, y la retirada de las sanciones económicas internacionales en contra del Gobierno.
La oposición, en cambio, exige cambios en el Consejo Electoral, del que desconfían, la liberación de todos los que considera «presos políticos», la restitución de sus poderes al Parlamento y la apertura de un canal humanitario para la entrada de alimentos y medicinas, algo ampliamente rechazado por el Ejecutivo.
Chavismo y oposición se verán las caras luego de que en la víspera de Nochebuena liberaran a 44 políticos presos en Venezuela y mientras la escasez de alimentos y medicinas se acentúa en el país caribeño mientras se registra una inflación anual del 2.616 %, según la Cámara.
Un día antes de que se retomen las conversaciones que se iniciaron el pasado 1 de diciembre, se registró en el país el asesinato de un miembro de la Constituyente y varios casos de saqueos de comida.