Oposición de Nicaragua insiste en adelantar elecciones porque Ortega está «inhabilitado»
EFE
La oposición nicaragüense aglutinada en la Alianza Cívica insistió este lunes en adelantar las elecciones previstas para noviembre de 2021, porque el presidente del país, Daniel Ortega, «está inhabilitado para gobernar».
La Alianza Cívica hizo esa propuesta en la mesa de negociación que mantiene con representantes del Gobierno de Ortega con la que esperan superar la crisis que estalló hace casi un año y que ha dejado cientos de muertos y de detenidos.
«La demanda es lograr elecciones adelantadas», dijo en rueda de prensa la experta constitucionalista e integrante de la Alianza, Azahalea Solís, desde el campus del Instituto Centroamericano de Administración de Empresas (Incae), en el sur de Managua, donde se desarrollan las conversaciones.
«No hay en este momento ninguno otro camino más que reformar la Constitución y reformar la Ley Electoral para que se pueda propiciar las elecciones adelantadas», señaló.
Solís explicó que esa es una demanda que viene haciendo el pueblo de Nicaragua desde hace 11 meses, cuando estalló la crisis.
«Ortega una vez más ha demostrado que está inhabilitado para gobernar. Alguien que está inhabilitado para gobernar, hay que sacarlo rápido», argumentó.
La constitucionalista indicó que la demanda es de elecciones libres, transparentes y observadas y que el tema sea incluido en el punto de la institucionalidad y lo democrático.
El jurista y político opositor José Pallais, también miembro del equipo negociador de la Alianza, dijo que entregaron al Gobierno un documento en el que incluyeron el anticipo electoral, para que sea suscrito a más tardar el próximo miércoles, cuando está previsto que culminen las negociaciones.
El canciller Denis Moncada, jefe negociador del Gobierno en la mesa de negociación, dijo el jueves pasado al Canal 10 de la televisión local que «definitivamente no» abordarán un anticipo de los comicios presidenciales, como exige la oposición.
Argumentó que discutir ese tema implicaría «violentar la Constitución vigente en nuestro país, que establece períodos presidenciales claramente definidos».
Además que, en el hipotético caso de aceptar, se sentaría un mal precedente porque en la mesa de negociación «no hay representación de partidos políticos» y que la Alianza Cívica por la Justicia y la Democracia, que es su contraparte, «está representando a quienes se vieron involucrado en un intento de golpe de Estado y en la violación al ordenamiento jurídico y constitucional del país».
Según la Constitución, los comicios generales deben celebrarse cada cinco años y están fijadas para noviembre de 2021.
Las partes fijaron para el próximo miércoles el fin de esas conversaciones.
Nicaragua sufre una grave crisis que ha dejado 325 muertos desde abril de 2018, de acuerdo con la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), aunque algunos grupos elevan a 561 las víctimas mortales, mientras que el Ejecutivo solo reconoce 199 y denuncia un intento de golpe de Estado.