Opinión | La diplomacia del Vaticano no se basa en declaraciones sino en acciones concretas
Redacción 800 Noticias
La respuesta de la carta de Francisco al régimen de Maduro debe llevarnos a reflexionar sobre las críticas injustificadas y groseras que muchos católicos y personas con poder de influencia en los medios de comunicación social hacían al Papa cada día de comunista y demás cosas.
La diplomacia del vaticano no es como la de cualquier país, tomando partes, como tampoco trabaja con bloques de países. Ella procura el diálogo interno en el país para lograr acciones concretas que lleven a transiciones democráticas y el apoyo al pueblo en su exigencia humanitaria.
Luego de semanas en negociaciones, el Vaticano recuerda ayer en una carta al «Señor» Maduro (no lo llama Presidente de la República, en la comunicación oficial), que la Santa Sede había puesto 4 condiciones que fueron incumplidas: elecciones generales, reconocimiento del Parlamento, liberación de presos políticos y apertura del canal humanitario. Condiciones éstas que son hoy pedidas por el Parlamento en nombre de Guaidó.
Es importante saber que en todo momento el Papa, el Estado del Vaticano y los obispos de Venezuela han estado en perfecta comunión, comunicación y colaboración en cada etapa de este proceso en las palabras y acciones realizadas. Muchas cosas no se ven porque cada quien tiene que trabajar a su nivel, y el Vaticano siempre salva su ejercicio diplomático y credibilidad mundial para lograr salidas pacíficas y sin derramamientos de sangre. La Iglesia no es una estructura democrática y su política diplomática no es de declaraciones públicas, sino de acciones muy concretas y efectivas.
Como he venido publicando y explicando en estos años y, especialmente en este último mes, es importante la cordura y el respeto en el uso de las redes sociales. Especialmente en situaciones tan delicadas como la venezolana donde más que declaraciones se necesitan acciones concretas y eso es lo que el Papa Francisco ha venido haciendo.
Dr. Rafael Luciani
