ONU: «No podemos acabar con el sida si no terminamos con su estigmatización»
EFE
La directora del Programa de Naciones Unidas sobre el VIH/Sida (ONUSIDA), Gunilla Carlsson, advirtió este martes de que no se podrá acabar con el sida si no se pone fin a la estigmatización y la discriminación asociadas a esta enfermedad.
«No podemos acabar con el sida si no terminamos con la estigmatización y la discriminación asociadas al VIH», dijo Carlsson en una rueda de prensa celebra en la sede de Naciones Unidas en Nueva York.
En su comparecencia, la directora de ONUSIDA subrayó que el informe presentado por su agencia a mediados de mes muestra que «es improbable que se logren los objetivos globales clave sobre el sida para el año 2020, incluso en aquellos países y regiones donde se están logrando avances».
Según este informe, difundido el pasado 16 de julio, unos 1,7 millones de personas contrajeron el virus de la inmunodeficiencia humana (VIH, desencadenante del sida) en 2018 (un 16 % menos que en 2010) y unas 770.000 murieron por enfermedades relacionadas con el sida.
Carlsson apuntó que para lograr el objetivo de solo 500.000 contagios al año «en los próximos 18 meses deberíamos reducir la infección un 70 por ciento, algo que nunca ha ocurrido antes».
Al igual que ya alertó el informe de su organismo, Carlsson advirtió de que los logros anuales «son cada vez más pequeños y el progreso se está desacelerando».
El estudio apunta que desde 2010 se han registrado «preocupantes incrementos» de las infecciones por VIH en zonas como Europa del Este y Asia central, los países árabes o Latinoamérica, aunque también destaca que en algunos países se han hecho grandes avances.
Para revertir este cambio y avanzar hacia un mundo sin infecciones, la directora de ONUSIDA reclamó, además de luchar contra el estigma y la discriminación hacia quienes padecen la enfermedad, «un fuerte compromiso de los líderes políticos» con la causa.
En total, en el mundo hay actualmente 37,9 millones de personas contagiadas y solo dos de cada tres tienen acceso a antirretrovirales, según el último informe anual que fue presentado en Sudáfrica con datos actualizados hasta 2018.