Nuréyev “resucita”con Dior en la pasarela de la moda en París
EFE/FotoReferencial
El célebre bailarín y coreógrafo Rudolf Nureyev resucitó este viernes en imagen y en estilo en la pasarela de París con el desfile de moda masculina de Dior para la temporada otoño-invierno 2024/25.
Y todo a partir de unas fotografías que hizo a Nureyev (1938-1993) en el Londres de los años 60, Colin Jones, tío del director artístico de la marca, Kim Jones, y a quien este ha querido homenajear.
En el interior de un gran espacio efímero, en la Escuela Militar y muy cerca de la Torre Eiffel, Dior presentó un desfile-espectáculo sobre una pasarela redonda y clara, hasta la que se accedía por un largo pasillo negro.
Nureyev, de estar vivo, llevaría prácticamente todo lo que se mostró, ya que representa con acierto su estilo, en el que reinaba la simplicidad estética.
Una colección completa y muy depurada, con piezas que sin duda nacen para perdurar en el tiempo, como si se tratara de una inversión.
Abundancia de trajes rectos, como en la anterior colección de Kim Jones, para Dior; pantalones anchos hasta el suelo, que recuerdan el ‘streetwear’, y que se combinan en más de un caso con camisetas. En el apartado de colores, predominio de tonos grises y tierra.
Entre las propuestas, también hay espacio para los brillos, con piedras bordadas, proyectando un saber hacer que evoca la alta costura, que tan bien domina esta casa.
Paso a la capa
Amante de las capas, con las que se vio más de una vez en escena a Nuréyev, el director artístico de la línea masculina de Dior presentó varias de estas prendas, en las que destacaban los motivos y los colores.
En líneas generales, la idea es seguir tomando la herencia y la tradición de la firma Dior, fundada en 1946, y abrazarla con la modernidad.
La influencia del ‘streetwear’, algo que caracteriza los diseños de Jones, continúa patente en las colecciones de esta ‘maison’ de lujo, sobre todo en los pantalones anchos.
Estos contrastan con modelos cortos, tipo ‘shorts’, y a los que acompañan en más de un caso altos calcetines de colores vivos, como verde, rosa o amarillo. Igualmente, estos vivos colores también se perciben en diversas propuestas de calzado.
Este, el calzado, es bajo en su totalidad, algo que el recordado Nuréyev combinaría con modelos de tacón. Y también hay espacio para las bailarinas, calzado que nacería inspirado en las zapatillas de ballet.
En el terreno de los accesorios, también había cabezas cubiertas de los modelos por gorras a caballo entre el turbante y la boina, de lo más originales.
Mientras, el motivo ‘cannage’, tan característico en Dior, se dejará ver la próxima temporada en bolsos y mochilas de tonos claros. Un justo equilibrio de estos últimos, como si se quisiera dejar claro que la protagonista es la ropa.
En lugar del dossier habitual, cada invitado recibió un cuidado libro de fotografías de retratos de Nuréyev, tomadas desde el objetivo de «un bailarín de ballet reconvertido en fotógrafo, cuyas imágenes reflejaron la historia social de la segunda mitad del siglo XX», como escribe en la introducción Kim Jones acerca de su tío, al que define como alguien «rebelde y muy creativo».
Entre los invitados famosos, destacaron el piloto Lewis Hamilton o la cantante Harin, del grupo femenino de K-Pop New Jeans, o el actor surcoreano Jung Hae In.
Dior, la contracción de Dios y oro, en palabras de Jean Cocteau, sigue desatando pasiones. Propuestas en coherencia con los tiempos que corren, sin olvidar la tradición, la historia y ese aura que impregna la «maison» desde sus orígenes. EFE
Únete a nuestro canal de Telegram, información sin censura: https://t.me/canal800noticias