Nuncio dice que el Papa animará a construir una Colombia «con ojos nuevos»
EFE
El nuncio apostólico en Bogotá, Ettore Balestrero, aseguró este viernes que el papa Francisco animará a los colombianos «a construir un país con ojos nuevos, a mirarse con ojos esperanzados y compasivos» durante su visita al país, que tendrá lugar entre el 6 y el 10 de septiembre.
«Hacer un paso hacia Jesús significa hacerlo hacia los demás. Si no caminamos hacia Dios caminamos hacia el abismo de la indiferencia, el orgullo y el odio», abundó el representante de la Santa Sede en Colombia en una entrevista con Efe en Bogotá tras anunciar la esperada visita del pontífice.
La curia colombiana explicó los pormenores del viaje apostólico al país, la tercera de un pontífice a Colombia, país que ya recibió al papa Pablo VI en 1968 y el hoy san Juan Pablo II en 1986.
Francisco llegará el 6 de septiembre a Bogotá y al día siguiente desarrollará su agenda en la capital colombiana para luego continuar en Villavicencio, capital del departamento central del Meta, y en Medellín y concluir en Cartagena de Indias, desde donde regresará a Roma.
«Villavicencio se encuentra a las puertas de la región de la Orinoquía y es la ocasión para que los indígenas y los habitantes de las zonas rurales puedan ir a ver el papa, que se acercará a ellos», indicó el nuncio nacido en Génova (Italia).
A su vez, Balestrero subrayó que en su visita a Cartagena de Indias, el papa no solo verá el casco antiguo de la ciudad declarada Patrimonio de la Humanidad de la Unesco, sino que también se desplazará hasta el «cinturón de la miseria».
«Es esencial que el papa conozca esta realidad para que el viaje sea objetivo y sincero», aclaró.
Balestrero, de cincuenta años y que en el pasado sirvió en el cuerpo diplomático vaticano en Corea del Sur y Holanda, aseguró que más que político, el viaje papal tiene un marcado e indudable tono espiritual y litúrgico.
«La visita tiene un objetivo claro; invitar a los colombianos a dar un paso adelante hacia Dios. En el corazón de los colombianos hay sed de libertad y amor, todo eso es sed de Jesús», resaltó.
El nuncio apostólico, que lleva cuatro años en Bogotá, país al que según confesó ya se «amañó», indicó que Colombia es un «proyecto» que necesita el aporte de toda la sociedad después de sufrir cinco décadas de conflicto armado con la guerrilla de las FARC, pugna que acabó en noviembre con la firma de un histórico acuerdo de paz.
«Francisco conoce Colombia, la visitó varias veces antes de ser elegido papa y aprecia mucho el país. Además está convencido que Colombia tiene un papel importante que jugar a nivel eclesial ya que es fundamental para la Iglesia latinoamericana y universal», subrayó el nuncio que describió su misión como un servicio más que como «una carrera» para descubrir los distintos rostros de la Iglesia.
Según los organizadores del esperado viaje, la agenda de la visita papal aún está por definir, sin embargo todo parece indicar que habrá tiempo para que el argentino mantenga encuentros con víctimas del conflicto armado, visite barrios deprimidos y reciba a jóvenes y religiosos.
Para el nuncio, uno de los objetivos de la visita es que Francisco «vea el mayor número posible de gente y que el mayor numero de colombianos se puedan acercar a él».
Asimismo, el sumo pontífice también atenderá a situaciones de «pobreza e inequidad», alentará a los jóvenes y apoyará el respeto a la vida.
Preguntado sobre como será la estancia del sumo pontífice en Bogotá, Balestrero señaló que la nunciatura vaticana, la embajada de la Santa Sede, no va a sufrir grandes reformar para acoger a Francisco.
«El Papa es una persona sencilla que viene a compartir nuestra vida ordinaria. El único trabajo que hay que hacer es arreglar una parte de la cubierta dañada por la lluvia, por lo demás nada que hacer», indicó el nuncio, quien destacó el carácter humilde y austero que revestirá la visita del obispo de Roma.
