La reserva, que se ubica en el distrito de Beylikova y es la segunda más grande tras la de China con 800 millones de toneladas, contiene 10 de los 17 elementos químicos de la tabla periódica denominados como tierras raras.
«El procesamiento de las tierras raras en Turquía aportará miles de millones de dólares a nuestra economía y mejorará el bienestar de nuestro país, además de crear fuertes empleos para la población local y nuestra juventud. El hallazgo reducirá nuestro déficit de cuenta corriente y permitirá que estemos entre los países líderes del mundo», cita el periódico a Metin Cekic, miembro de la junta directiva de la Asociación de Exportadores de Minerales de Estambul (IMIB).
El ministro de Energía y Recursos Naturales de Turquía, Fatih Donmez, anunció el descubrimiento del campo minero de Beylikova el pasado viernes.
Una planta piloto en Beylikova, avanzó Cekic, procesará al año unas 1.200 toneladas de minerales en una primera fase y alcanzará el volumen de 570.000 toneladas en el futuro, incluidas 72.000 toneladas de barita, 70.000 toneladas de fluorita y 250.000 toneladas de torio.
La barita que se obtenga allí se utilizará como aditivo en producción industrial, perforación de pozos de petróleo o gas natural, fabricación de pinturas y papel. La fluorita tendrá aplicaciones en siderurgia, producción de ácido clorhídrico, gasolina de alto octanaje y pesticidas, así como en sectores de cemento, vidrio, plástico, cerámica y alimentación.
Los concentrados de tierras raras obtenidos tras el enriquecimiento de los minerales serán materia prima para muchos sectores importantes, incluidas las baterías de vehículos híbridos, cristales de cámaras y telescopios, sistemas de almacenamiento de energía, dispositivos de visión nocturna y lentes especiales.
En la última etapa se obtendrán imanes para cirugía ocular, producción de láseres verdes infrarrojos de alta potencia, dispositivos de medición a distancia o gafas para soldar, así como el óxido de torio destinado a motores de automóviles híbridos, productos de vidrio y cerámica, cables de fibra óptica, pantallas de televisión y cristales inteligentes.