Nueva York recibe a miles de marines en su tradicional «Semana de la Flota»
EFE
Unos 2.300 marinos echan el ancla estos días en Nueva York con motivo de la tradicional «Semana de la Flota», un homenaje de la Gran Manzana a las fuerzas marítimas del Ejército de EEUU que, desde hace 31 años, llena su puerto de navíos militares y sus calles de uniformes blancos o de camuflaje.
La ciudad dio comienzo a este patriótico evento el miércoles, con un «desfile» de trece barcos que permanecerán atracados y en su mayoría abiertos al público en el río Hudson, en el ala oeste de Manhattan, hasta el próximo martes, después de conmemorar a los caídos en servicio en la fiesta nacional de Memorial Day.
Pero no todo son barcos. En medio de la concurrida Times Square, acapara la atención un todoterreno militar aparcado junto a la icónica pantalla de luces LED que representa la bandera estadounidense, en el kilómetro cero de la plaza, y que además de ser una atracción, alberga un centro de reclutamiento de la Armada.
Se trata de un vehículo apodado LMADIS y empleado por el cuerpo marítimo, explica a Efe el marine Tyler Bickel. Apuntando a su interior y a una suerte de altavoces situados arriba, explica que contiene un potente sistema para detectar e inhabilitar drones -«freírlos», literalmente- a distancia con un ataque electrónico.
Este marine de 23 años, procedente de un pequeño pueblo de Colorado, dice estar encantado con el recibimiento de la gente en Nueva York en la que es su primera Semana de la Flota y después parece bromear con que el vehículo «se utiliza como una Xbox», algo que con toda seriedad confirma su compañero, Tobias Viel.
«Lo puede manejar hasta un niño», asegura el otro marine, de 21 años, nacido en Tennessee. Desgranando únicamente que ha estado desplegado «en el Mediterráneo», debido a información clasificada, ocupa el asiento delantero y saca de la guantera un mando de videoconsola que se puede enchufar bajo el volante para controlarlo.
Uniformados con mono de camuflaje, botas y gorra, y con sus apellidos visibles en la solapa, ambos relatan que llevan tres años en la Marina y que han llegado en el USS New York, un buque anfibio de transporte que es la estrella de este año, ya que contiene 7,5 toneladas de acero en su proa recobradas de las Torres Gemelas.
Los dos marines estuvieron el jueves por la mañana en la plaza, a escasos metros de una carpa de información junto a la que un hombre entrenaba a pleno sol ante una multitud de curiosos, que aprovechaban para acercarse, preguntar, agradecer el servicio de los militares y, en casi todos los casos, hacerse fotos con ellos.
Y es que la llegada de los marines, guardacostas y otros agentes de las fuerzas marítimas a Nueva York es todo un acontecimiento con el que el Ejército se acerca cada año a la sociedad, permitiendo que cualquier ciudadano, incluidos los niños, conozcan los entresijos de y herramientas de sus trabajos.
Lo hacen, además, en un ambiente festivo y también a través de las redes sociales: las imágenes se pueden subir con la etiqueta «FleetWeekNYC», donde quedará grabado otro álbum del paso de los marines por la ciudad, desde demostraciones profesionales hasta conciertos, como el que se celebra esta noche en Times Square.
Pero sin duda uno de los mayores atractivos de su visita es acceder a grandes obras de ingeniería naval como el USS New York, anclado en el Pier 88 de Manhattan, o los barcos patrulla de la Armada que abandonan hoy el Intrepid Sea, Air and Space Museum, epicentro de la celebración, en el que se forman largas filas.