Nueva York multa a Deutsche Bank por omitir supervisión financiera de Epstein
EFE
El departamento de Servicios Financieros del estado de Nueva York anunció este martes que impueso a Deutsche Bank una multa de 150 millones de dólares por «fallos de procedimiento, errores y negligencias» en la supervisión de las cuentas del magnate Jeffrey Epstein, acusado de tráfico sexual de menores y que se suicidó el año pasado en prisión.
La superintendente del ente regulador financiero, Linda Lacewell, explicó en un comunicado que «Deutsche Bank no supervisó adecuadamente la actividad contable a nombre de este delincuente sexual registrado, pese a que había mucha información pública disponible en cuanto a las circunstancias que rodeaban la mala conducta criminal del Sr. Epstein».
Se trata de la primera acción impositiva de un regulador contra una institución financiera por su trato con Epstein y ha concluido con un acuerdo de pago, indicó el Departamento.
Deutsche Bank, a través de su rama estadounidense, «procesó cientos de transacciones por valor de millones de dólares que, como mínimo, deberían haber generado un escrutinio adicional», entre las que el regulador cita pagos a personas sobre las que recaían «alegaciones públicas» de haber ayudado a Epstein a abusar de mujeres jóvenes.
El departamento financiero de Nueva York señala que en las cuentas de Epstein se registraron pagos para «arreglos de compensación» por valor de 7 millones de dólares y decenas de pagos a bufetes de abogados por valor de 6 millones, «en lo que parecen haber sido los gastos legales del Sr. Epstein y sus co-conspiradores».
Asimismo, cita «pagos a modelos rusas; pagos para matrículas escolares, hoteles y alquilares de viviendas de mujeres y (en coherencia con las alegaciones previas de mala conducta) pagos directos a numerosas mujeres con apellidos del Este de Europa», así como «retiradas de efectivo periódicas» que alcanzaron los 800.000 dólares en unos cuatro años.
Nueva York señala que el banco incurrió en «una serie de fallos de procedimiento, errores y negligencias» al gestionar y supervisar las cuentas de Epstein, lo que resultó en que a lo largo de su relación con el magnate «muy pocas transacciones problemáticas fueron cuestionadas» e incluso cuando sí lo fueron, «se despejaron normalmente sin una explicación satisfactoria».
Epstein se suicidó en agosto de 2019 en una prisión de Nueva York, a la espera de un juicio en el que estaba acusado de crear una red de tráfico sexual de menores y de abusar de decenas de niñas en sus mansiones de Nueva York y Florida en un periodo a principios de la década de los 2000.
En 2008, el magnate financiero llegó a un acuerdo con la Fiscalía de Florida para cerrar una investigación similar y se declaró culpable de cargos estatales menores, fue condenado a 13 meses de cárcel, llegó a un acuerdo económico con las víctimas y se registró como delincuente sexual.
La semana pasada, la británica Ghislaine Maxwell, socia y expareja de Epstein, fue detenida en el estado de New Hampshire (EEUU) y acusada de ayudar al magnate en esa trama de abuso sexual a menores tras permanecer en paradero desconocido durante un año.