Nueva York comprará Grand Central Station por 35 millones tras años de alquiler
EFE
El servicio de transporte público de Nueva York (MTA) prevé aprobar este jueves la compra por 35 millones de dólares de la emblemática Grand Central Station, que arrienda por 2,4 millones anuales a una empresa privada de acuerdo con un contrato para 280 años firmado en 1994.
La operación se someterá a una votación de la junta directiva de la MTA este jueves y previsiblemente saldrá adelante, después de que el comité financiero del organismo ya diera la luz verde el martes pasado.
La estación, una de las atracciones más visitadas de Nueva York, perteneció a PennCentral Transportation hasta que se declaró en bancarrota en 1970 y sus activos acabaron pasando a American Premier Underwriters, con la que la MTA firmó un contrato de alquiler hasta el año 2274 con opción de compra en 2019.
Esa compañía vendió a la firma Midtown Trackage Ventures a principios de los 2000 los derechos de propiedad de los activos que la MTA pretende comprar junto a las líneas de tren de Harlem y Hudson, que le darán «un control claro» sobre la terminal de acceso por el Este que se está construyendo bajo Grand Central.
«Teníamos que ejercer la opción de compra o seguir siendo arrendatarios otros 270 años. El marco de los tipos de interés -y el descuento de 500.000 dólares ofrecido por el vendedor- implican que es más barato comprar ahora que pagar un alquiler todo ese tiempo», explicó el jefe de Desarrollo de la MTA, Janno Lieber.
En un comunicado, Lieber aseguró que «no hubo que pensar dos veces desde el punto de vista financiero» la operación, que además «asegura el control por parte de la MTA de los derechos de construcción cerca de las líneas de Harlem y Hudson».
La parte del Hudson Line que adquiere el servicio de transporte público representa 2,2 millas (3,54 kilómetros) hasta la estación de Poughkeepsie, mientras que la de la Harlem Line se extiende hasta Dover Plains, al norte de Nueva York.