Niños portadores de Hepatitis B podrían sufrir cirrosis
“A los niños les da cirrosis debido a enfermedades congénitas como lo es la atresia de vías biliares, hepatitis autoinmune, y especialmente ataca aquellos niños que han sido trasplantados con problemas hematoncológico”, así lo explica la hepatólogo Lucy Dagher.
Afirma que “los infantes qué son sometidos a tratamientos oncológicos pueden llegar a ser portadores de Hepatitis B, la cual debe ser tratada a tiempo, sino ese niño a los 14 años sufrirá de cirrosis y hasta cáncer de hígado”.
La atresia de vías biliares es una obstrucción de nacimiento de los conductos extrahepáticos, que canalizan la salida de la bilis. El hecho de que la bilis no pueda drenar, causa daño al tejido hepático, por tanto endurece el hígado y provoca cirrosis.
La cirrosis se ha incrementado en los niños por las malformaciones congénitas y enfermedades metabólicas o de tipo viral. Es una enfermedad que entorpece el funcionamiento del hígado producido por una lesión progresiva, lo que causa que el mismo no procese las proteínas, grasas, hormonas, carbohidratos, sales biliares y otros elementos para su asimilación, provocando un desequilibrio en el organismo.
La especialista señala que “la cirrosis puede darse por hepatitis neonatal infecciosa provocada por un virus. Esta puede ser fulminante porque ocasiona sangrado del tubo digestivo, alteraciones del nivel de conciencia, coma y daño hepático masivo”.
Lisbeth Brazón
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