Nicaragua | Juicio a opositores violó pacto mundial de derechos civiles
EFE
El juicio en el que fueron condenados a 13 años de prisión los líderes opositores nicaragüenses Félix Maradiaga y Juan Sebastián Chamorro violó el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos (Pidcp), según un informe presentado este viernes por el defensor estadounidense Jared Genser.
El juicio, citado en el informe como una “pesadilla kafkiana” o “espeluznante”, contravino hasta en 36 ocasiones el Pidcp, según la defensa, al atentar contra derechos humanos fundamentales como la libertad de expresión, la no discriminación y la presunción de inocencia.
También contravino el derecho a “una audiencia justa y pública en la determinación de los cargos criminales por un tribunal competente, independiente, e imparcial”.
El proceso judicial “comenzó con arrestos ilegales, incluyó 84 días de desaparición forzada y ha sido caracterizada por tortura, detención prolongada en régimen de incomunicación, graves violaciones al debido proceso, y detención arbitraria, todo en flagrante violación de sus derechos bajo el derecho nicaragüense e internacional”, destacó el informe.
Maradiaga y Chamorro, que aspiraron a ser candidatos presidenciales en las elecciones de noviembre pasado, en las que el presidente Daniel Ortega obtuvo una cuestionada nueva reelección, apenas han logrado hablar con sus abogados, algunos de los cuales tuvieron que huir del país por su seguridad, dijo Genser.
Los acusados tampoco tuvieron libre acceso a sus abogados durante el juicio, realizado en la cárcel policial conocida como “El Chipote” y dirigido por el juez Quinto de Distrito Penal de Managua, Félix Ernesto Salmerón Moreno.
De acuerdo con gráfico representativo de la audiencia, los opositores no tuvieron oportunidad de hablar entre ellos ni de estar próximos a sus familiares, quienes permanecieron en otro extremo de la sala, junto a la fiscal auxiliar Heydi Estela Ramírez Olivas.
PREOCUPACIÓN POR LAS CONDICIONES DE RECLUSIÓN
Tanto Bertha Valle como Victoria Cárdenas, esposas de Maradiaga y Chamorro, respectivamente, se mostraron preocupadas por las condiciones que vivirán los reos durante el cumplimiento de la sentencia.
Maradiaga, de 45 años, ha perdido 50 libras (unos 24 kilos) de peso y permanece en una celda a oscuras las 24 horas del día, mientras que Chamorro, de 51 años, perdió 30 libras (unos 15 kilos) y su celda siempre está iluminada.
“Esto ha sido una forma intencional de parte del régimen, para exponerlos a ellos a un deterioro físico, y eso a nosotros nos debe llamar la atención, nos debe alarmar, porque hay violación a las personas presa políticas en Nicaragua”, afirmó Valle.
Por su parte, Cárdenas, sostuvo que dichas condiciones también representan una “tortura para los familiares de los presos políticos”, y afirmó que teme por la vida de todos los detenidos.
Sobre el futuro de Maradiaga, Chamorro y los restantes 174 “presos políticos” de Nicaragua, Genser indicó que en su «experiencia con 50 presos políticos en 20 países diferentes es que (los gobiernos) solo dan libertad cuando no tienen otra opción”.
Pero alentó a los familiares a mantener la presión sobre los organismos internacionales, y “hablar con los aliados de Ortega para que sepan que van a tener consecuencias por apoyar a un régimen ilegítimo”.
Maradiaga y Chamorro forman parte de un grupo de más de 40 líderes opositores, críticos de Ortega y profesionales independientes, arrestados precio a las elecciones de noviembre pasado.