¿Necesita la policía de Escocia a los cazafantasmas?
telecinco.es/
Una familia formada por una madre y su hijo llamó a la policía, afirmaban estar viviendo una situación violenta en su vivienda de Rutherglen. Por la descripción del hecho, los agentes pensaron que las víctimas podían estar padeciendo algún problema mental pero, cuando los agentes llegaron al lugar, no podían creer lo que vieron sus ojos: ropa volando por la habitación, luces apagándose y el perro, un chihuahua, sentado sobre un seto.
Incluso cuando los agentes avisaron a sus superiores, estos dudaron de lo ocurrido. Sin embargo, ahora parecen estar tomándoselo en serio, tanto que, como relata la publicación The Telegraph, han recurrido al consejo de la iglesia católica y la casa ha sido bendecida.
Sin embargo, madre e hijo han abandonado la vivienda y se han trasladado a casa de unos familiares.
Una fuente policial ha reconocido que el problema de la investigación reside en que no se ha cometido ningún delito: «Qué más podemos hacer que trabajar con los informes de unas perturbaciones».