Mujer es acusada de asesinato tras la muerte de su hijo de 10 años en EE.UU.
EFE
Heather Barron, la madre del niño Anthony Avalos, fue detenida este viernes y acusada de asesinato, abuso a un menor y tortura por la muerte del niño 10 años, quien fue hallado sin vida el pasado 20 de junio en la vivienda familiar, informó la Fiscalía de Los Ángeles.
Al igual que Heather Barron, su novio, Kareem Leiva, quien fuera detenido el pasado miércoles, fue acusado hoy de asesinato, tortura y ataque a un menor que resultó en su muerte, agregó la Fiscalía.
De acuerdo con la investigación del Departamento de Alguaciles del Condado de Los Ángeles (LASD), el 20 de junio dos oficiales respondieron a una llamada de alerta proveniente de Lancaster, al norte de Los Ángeles, donde residía la familia.
Los efectivos encontraron al menor inconsciente y en grave condición, y lo condujeron a un hospital local donde murió a la mañana siguiente.
De acuerdo a reportes policiales, fue la madre la que hizo la llamada al teléfono de emergencia 911 y dijo que su hijo sufrió una caída, pero los oficiales iniciaron una investigación tras observar circunstancias sospechosas.
Tras el suceso, el Departamento de Servicios Infantiles y de Familia (DCFS) del Condado de Los Ángeles se ha hecho con la custodia de los hermanos de la víctima, cuyo caso guarda un triste paralelo con el del niño hispano de 7 años Gabriel Fernández, que murió en 2013 luego de ser torturado.
De ser hallada culpable, Barron enfrenta una sentencia de entre 22 años de prisión y cadena perpetua, mientras que Leiva podría pagar entre 32 años en la cárcel y cadena perpetua.
El DCFS confirmó esta semana que habían recibido reportes desde el año 2013 que alertaban de la situación del menor
En una conferencia de prensa, el abogado Brian Claypool, que representa a algunos de los familiares del niño, pidió hoy a esta agencia «100 % transparencia» y que se den a conocer todos los reportes de abuso relacionados con el menor y los resultados de las investigaciones, así como cualquier otro reporte de abuso en esa vivienda en los últimos cinco años.
La junta de Supervisores del Condado de Los Ángeles solicitó esta semana que les sea presentada una historia completa del caso, así como de posibles deficiencias en los sistemas de bienestar infantil y de aplicación de la ley que hayan podido contribuir a la muerte del niño.