Miles de migrantes se dirigen a las fronteras de la UE a través de Macedonia y Serbia
AFP. – Más de 6.000 inmigrantes que irrumpieron en Macedonia, en su gran mayoría sirios, tomaron el domingo la ruta del norte, hacia las fronteras de Europa occidental, después de haber sido retenidos durante días en la frontera con Grecia.
La inmensa mayoría de los refugiados se dirigieron a Serbia, donde hay un campamento organizado por el Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados (ACNUR) en la aldea de Miratovci, donde se distribuía comida y agua.
Desde ese pueblo los inmigrantes son transportados a un centro de acogida estatal en la ciudad de Presevo, donde reciben documentos temporales. De ahí pueden optar por subir a autobuses, que los conducen a Belgrado o hasta la frontera con Hungría, explicó una emisora pública, RTS.
En Macedonia, mientras tanto, siguen llegando centenares de aspirantes al asilo todos los días.
En la ciudad macedonia fronteriza de Gevgelija, la policía declaró que ha dado papeles a unas 4.000 personas en las últimas 24 horas.
Otras 1.000 personas aproximadamente aguardan su turno para poder cruzar el país con documentos. Provenientes de los puertos griegos, sobrepasados por la llegada constante de gente en condiciones dramáticas, pueden cruzar hasta Macedonia libremente, y la policía no toma ninguna medida para frenarlos, pudo comprobar la AFP.
El sábado más de 1.500 personas, atrapadas en una «tierra de nadie» entre Macedonia y Grecia durante tres días, cruzaron tras superar los cordones policiales, en medio de un caos de gritos y golpes.
«Fue una locura durante toda la noche, gente por todas partes, autobuses que llegaban y se iban, taxis de otros lugares», explicó a la AFP un taxista que se identificó como Milan.
Las autoridades tuvieron que fletar trenes especiales para hacer frente a la marea humana.
Solo hace falta cuatro horas de tren para cruzar 180 km de territorio macedonio hasta la ciudad de Tabanovce, en la frontera con Serbia (180 km).
Un portavoz policial macedonio, Ivo Kotevski, dijo que la policía no quería utilizar la fuerza pero que buscaría métodos alternativos para frenar la entrada de indocumentados.
Desde mediados de junio han llegado más de 42.000 personas, entre ellas 7.000 menores, a Macedonia procedentes de Grecia, según el gobierno.
El sirio Mohamed Rostom pasó por Irak y atravesó Turquía con su esposa y sus tres hijos, antes de llegar a Grecia. Dijo que había pagado 4.000 euros a los traficantes para que lo condujeran en barco hasta Grecia.
«Tres personas murieron en ese trayecto. Yo quiero ir a Alemania para trabajar. Quiero sentirme seguro, vivir como un ser humano, y por eso he elegido Europa», dijo.
Durante tres días, entre el jueves y el sábado, Macedonia declaró el estado de emergencia y desplegó fuerzas policiales. Llegó a prohibir durante 24 horas el paso de los indocumentados, pero la tensión creció al máximo, hasta el estallido del sábado, cuando los inmigrantes se abalanzaron sobre los cordones policiales y consiguieron atravesarlos.