MÉXICO| Espantoso asesinato de una joven tras tomar un taxi indigna a la sociedad
El Paós de España
La joven Mara Castilla, de 19 años, había salido a bailar con sus amigos en Cholula (Puebla) en México el pasado viernes 8 de septiembre. A las cinco de la madrugada pidió un auto al servicio de transporte privado Cabify para volver a casa. Fue la última vez que se la vio con vida. Las autoridades mexicanas han hallado su cuerpo, tirado en un terreno cercano y cubierto con una sábana, una semana después. La autopsia revela que fue agredida sexualmente y luego asfixiada.
El caso, un nuevo feminicidio en un país en el que el asesinato de mujeres se ha convertido en una pandemia, ha despertado una ola de protestas que se sentirán este domingo en las principales ciudades de México, donde hay convocadas manifestaciones de rechazo. En el centro de las iras está el incremento de feminicidios en el centro del país, que ha obligado a declarar la alerta de género en más de una decena de municipios.
La policía ha detenido al conductor del Cabify que transportó a la joven estudiante de Ciencias Políticas y está en prisión acusado de feminicidio. La investigación ha desvelado que media hora después, el vehículo que llevaba a Mara llegó a su domicilio y se estacionó frente a la vivienda familiar durante más de 20 minutos. Según la versión del conductor, la joven pidió bajarse unos metros antes de llegar. La investigación, no obstante, demostró que el chófer se quedó con su celular, lo que permitió rastrear sus movimientos vía GPS durante aquellas horas. La recogió en el bar, llegó a su domicilio, donde se detuvo frente a la puerta como si hubiera completado correctamente el trayecto y luego la llevó a un motel donde la violó y asfixió.
Las redes sociales arden contra la compañía en la que se transportaba la joven, que lamentó “profundamente el fallecimiento” de la joven, en un primer momento. Ante las críticas por no hablar de asesinatos, este sábado la compañía se disculpó y aseguró que están “consternados y condenamos el feminicidio de Mara. La empresa Cabify presume de ofrecer un servicio más seguro que otros, ya que sus conductores deben pasar controles de conducción, psicométricos y de antecedentes. En su declaración de términos y condiciones, Cabify renuncia a “cualquier obligación, reclamación o daños surgidos” en la relación entre el usuario y el “tercero transportista”. El Gobierno de Puebla anunció que se investigará a la compañía.
Lo ocurrido ha indignado a una buena parte de la sociedad mexicana, ya hastiada por los feminicidios y ha desatado, de nuevo, la movilización de colectivos de mujeres, principalmente, pero también intelectuales, artistas y cientos de miles de jóvenes, que exigen a las autoridades “volver a casa, sin perder la vida en el intento”. “Quiero un México que no sea igual a feminicidio”, claman.