México: Ataque deja un niño muerto y ocho migrantes heridos
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Un menor de edad falleció y ocho migrantes resultaron heridos en Sonora, noroeste de México, tras ser atacados a tiros por sicarios que acribillaron el vehículo donde eran llevados por traficantes de personas hacia la frontera con Estados Unidos, informó el domingo (18.08.2024) la Fiscalía General de Justicia Estatal.
Los hechos ocurrieron la madrugada del domingo en el municipio de Sáric, en el desierto de Sonora, a escasos 54 kilómetros de la frontera internacional entre México y Estados Unidos. Pobladores del lugar llamaron al 911 para reportar el ataque, reporta la nota de DW.
Tres mujeres y cinco hombres heridos
La Fiscalía de Sonora confirmó en un informe preliminar que encontraron en la localidad de Tubutama un vehículo tipo van incendiado y baleado, «resultando en la muerte de un menor de edad y lesiones a ocho personas, cinco hombres y tres mujeres”.
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Los heridos y sobrevivientes fueron trasladados a un hospital, mientras las autoridades buscaban a los presuntos responsables.
Imágenes difundidas en redes sociales muestran el vehículo calcinado siendo retirado del lugar por una grúa. Este ataque se suma a una serie de hechos violentos que han azotado las carreteras de esta región fronteriza en los últimos meses; el móvil principal es la disputa de bandas criminales por la plaza fronteriza para el trasiego ilegal.
Los ataques a camionetas que transportan personas indocumentadas, provenientes del sur de México, Sudamérica, África y Asia, son muy comunes en la región del desierto de Sonora que colinda con Arizona, Estados Unidos, debido a la pugna entre bandas que disputan este lucrativo negocio ilícito.
Las bandas de ‘polleros’ (traficantes de personas) recogen a sus víctimas en el municipio de Altar, junto a la carretera Federal México 2, de ahí parten por el camino que conecta desde Sáric, hacia Tubutama.
Está ruta de migración es utilizada por los criminales por la nula vigilancia y permisividad de las autoridades en México, además que al cruzar la línea internacional hacia Arizona, la orografía escarpada en el desierto complica la vigilancia a las agencias de Estados Unidos.