May mantiene conversaciones con diputados para desbloquear el «brexit»
EFE
La primera ministra británica, Theresa May, continúa este jueves las conversaciones con diputados de distintos partidos a fin de desbloquear la crisis del «brexit», después de que el Parlamento rechazase su acuerdo negociado con Bruselas.
La jefa del Gobierno ofreció anoche mantener estos contactos políticos tras superar en la Cámara de los Comunes -por una mayoría de 19 votos- una moción de censura contra el Gobierno que había presentado el martes el líder de laborista, Jeremy Corbyn.
No obstante, Corbyn se negó a reunirse con la «premier» si no recibe antes garantías de que no habrá un «brexit» sin acuerdo.
May se reunió anoche con los líderes parlamentarios de los partidos Liberal Demócrata, el Nacionalista Escocés (SNP) y el galés Plaid Cymru con el objetivo de buscar un consenso sobre los términos de la retirada británica de la UE de cara al próximo 29 de marzo, la fecha establecida para la salida del Reino Unido del bloque europeo.
La líder de Plaid Cymru en el Parlamento, Liz Saville Roberts, afirmó a los medios que su formación está «comprometida a encontrar una solución real» a la actual crisis, pero que eso implica «sacar de la mesa (la posibilidad) de un «brexit» sin acuerdo y que haya un voto del pueblo (un segundo referéndum)».
Por su parte, el líder del Partido Liberal Demócrata, Vince Cable, expresó su satisfacción porque la primera ministra haya mostrado la «voluntad de conversar sobre estos asuntos en detalle», aunque recalcó que su opción preferida es un segundo plebiscito.
«Creo que ante la actual crisis, eso es positivo», declaró hoy Cable a la BBC sobre la actitud de la primera ministra.
«El que mi equipo tenga voluntad de seguir conversando con su equipo de destacados secretarios de Estado sugiere que, al menos, hay una voluntad de explorar cosas», agregó Cable.
En tanto, el líder del SNP en los Comunes, Ian Blackord, también se mostró a favor de que en las conversaciones con la jefa del Gobierno se considere un retraso del «brexit» y la opción de convocar un segundo referéndum europeo.
El martes, el Gobierno sufrió en los Comunes una derrota cuando 432 diputados rechazaron el pacto que fijaba los términos del «divorcio» de la UE frente a 202 que lo hicieron a favor.
El Reino Unido está sumido en una profunda crisis política, dos años y medio después de que los británicos votaran a favor del «brexit» en el referéndum celebrado el 23 de junio de 2016.
El acuerdo negociado por May con la UE no convenció a los diputados, que veían con desconfianza la controvertida salvaguarda pensada para evitar una frontera fija entre las dos Irlandas.
Muchos diputados rechazaban esa «garantía» porque temían que dejase atado al Reino Unido a las estructuras de la UE en contra de su voluntad, en caso de que Londres y Bruselas tarden más de lo esperado en sellar un acuerdo comercial durante el periodo de transición -del 29 de marzo de 2019 a finales de 2020.