Mascarilla casera de gelatina para reparar el cabello
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Ya hemos hablado en otras ocasiones de las diferencias entre hidratar, nutrir y reparar el cabello… pues bien, esta mascarilla casera es todo un descubrimiento para reparar las hebras capilares por su alto contenido en proteínas.
La gelatina neutra, o gelatina sin sabor aporta proteínas, aminoácidos y colágeno a nuestro pelo, lo que la hace muy beneficiosa para reparar cabellos castigados y mejorar el crecimiento del mismo aportando brillo y suavidad. También es ideal para redefinir cabellos rizados.
Preparación de la mascarilla con gelatina
Puedes preparar esta mascarilla con gelatina neutra en polvo o en láminas de forma muy rápida y sencilla.
Si la gelatina de tu elección es en polvo, lo único que tienes que hacer es calentar una taza de agua hasta que esté casi hirviendo. Una vez el agua esté bien caliente, mezcla un sobre de gelatina removiendo bien hasta que se disuelva perfectamente.
Si has elegido utilizar gelatina en hojas o láminas, debes hidratar durante unos 10 minutos 5 hojas de gelatina. Calienta una taza de agua casi hasta que hierva, y luego añade las hojas de gelatina hasta que estén perfectamente disueltas.
Una vez hecha la disolución y mientras todavía está caliente, es el momento de agregar algún ingrediente extra si es lo que deseas (algún aceite para nutrir, gel de aloe vera para hidratar, o una cucharada de vinagre de manzana o limón para aportar brillo).
Deja reposar la mezcla para que enfríe. No debes dejarla reposar demasiado tiempo o la gelatina empezará a cuajar, lo que puede dificultar bastante la aplicación.
Como aplicar en el pelo la mascarilla de gelatina
En primer lugar, debes lavarte el pelo con champú antes de aplicar esta mascarilla para favorecer la absorción de proteína.
Una vez tu cabello esté bien limpio, procede a aplicar la disolución de gelatina.
Puedes verter la mezcla en un pequeño bol y, boca a bajo, ir introduciendo tu pelo en él para que quede bien empapado.
Otro modo de aplicarla es poniendo la mezcla en un vaporizador o atomizador e ir poco a poco empapando el pelo con ella.
Asegúrate de que la mezcla queda bien distribuida por todo tu pelo.
Llegados a este punto, tienes dos opciones:
– Cubrir tu pelo con un gorro de plástico y dejar actuar durante unos 30 minutos.
– Secar el pelo con el secador a temperatura media. Esta forma de aplicación es muy similar a la del Aphogee.
Por último, aclara tu pelo con abundante agua tibia y continua tu rutina capilar y de peinado con normalidad.
Enseguida podrás apreciar los beneficios de esta potente (y barata) mascarilla casera.
El pelo queda reparado, suave y brillante.
Con información de SinSiliconas
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