Los Guardianes de la Revolución de Irán rechazan cualquier diálogo con EE.UU.
EFE
El comandante general de los Guardianes de la Revolución iraníes, Mohamad Ali Yafarí, rechazó categóricamente iniciar negociaciones con Estados Unidos y advirtió al presidente estadounidense, Donald Trump, de que Irán no es Corea del Norte.
La propuesta de Trump de dialogar «sin condiciones previas» con las autoridades iraníes es «un escenario demagógico», dijo Yafarí, según publicó este miércoles la agencia Tasnim, vinculada con los Guardianes.
El comandante explicó que los principios de la nación iraní son totalmente diferentes a los de los países que se doblegan ante EE.UU., por lo que agregó que «los iraníes nunca permitirán que las autoridades entren en conversaciones con el ‘Gran Satán».
«Señor Trump. Irán no es Corea del Norte que aceptó su oferta de reunión», subrayó el general, quien afirmó que un encuentro entre responsables iraníes y estadounidenses «nunca se hará realidad».
La postura de Yafarí es una de las más tajantes escuchadas desde que Trump expresara el lunes que estaría dispuesto a reunirse con su homólogo iraní, Hasan Rohaní, «sin condiciones previas», porque, según argumentó, «no hay nada de malo en reunirse».
El presidente estadounidense insistió también ayer que espera que las autoridades iraníes se pongan en contacto con su administración «muy pronto» debido a las dificultades que atraviesa el país.
Irán se encuentra sumido en una crisis económica que se agravará con la entrada en vigor en agosto y noviembre próximos de las sanciones estadounidenses, reimpuestas tras la salida de EE.UU. del acuerdo nuclear de 2015.
El regreso de EE.UU. al pacto nuclear fue la condición expresada por numerosos responsables iraníes desde ayer para iniciar cualquier tipo de negociaciones con Trump, aunque remarcaron que es un presidente en el que «no se puede confiar».
El ministro iraní de Asuntos Exteriores, Mohamad Yavad Zarif, escribió anoche en Twitter que el acuerdo nuclear «ha estado funcionando» y que EE.UU. «solo se puede culpar a sí mismo por retirarse» del pacto.
«Las amenazas y las sanciones no funcionan. Pruebe con el respeto: hacia los iraníes y hacia sus compromisos internacionales», aconsejó Zarif.
En la misma línea, el vicepresidente del Parlamento iraní, Ali Motaharí, aseguró que negociar en las actuales circunstancias sería «una humillación».
«Las conversaciones con EE.UU. hubieran sido correctas si no se hubiera retirado del JCPOA (siglas en inglés del acuerdo nuclear) ni hubiera impuesto sanciones a Irán», añadió.
El acuerdo nuclear, firmado entre Irán y el llamado Grupo 5+1 (EE.UU., Rusia, China, Francia, Reino Unido y Alemania), limita el programa atómico de Teherán a cambio del levantamiento de las sanciones internacionales contra el país persa.