Llega a Zimbabue el cuerpo del expresidente Robert Mugabe
EFE
El cadáver del expresidente de Zimbabue Robert Mugabe, fallecido el pasado día 6 en Singapur, fue hoy repatriado a la capital zimbabuense, donde le esperaban centenares de ciudadanos y las más altas autoridades del estado.
Envuelto en la bandera nacional, el féretro fue recibido con alfombra roja en el aeropuerto Robert Gabriel Mugabe de Harare por una guardia miliar de honor y el presidente zimbabuense, Emmerson Mnangagwa.
Mugabe, quien fue depuesto en noviembre de 2017 en un golpe militar sin derramamiento de sangre, tras casi 40 años de mandato, falleció a los 95 años tras permanecer 5 meses ingresado en un hospital del citado país asiático.
Sus restos mortales serán trasladados al estadio de Rufaru, en Harare, donde este jueves y viernes sus compatriotas podrán presentarle «sus últimos respetos», según el Gobierno.
Ya el sábado, en principio, serán llevados al Estadio Nacional de Deportes para la celebración de un funeral de Estado, al que se espera que acudan numerosos diplomáticos y líderes extranjeros.
El lugar de su sepultura sigue siendo desconocido, en una disputa entre el Gobierno, que quiere enterrarlo el domingo en el Acre de los Héroes -un santuario reservado en exclusiva para los héroes nacionales- y la familia Mugabe, que asegura que -según los deseos del difunto- este debería ser enterrado en su pueblo natal, Zvimba, ubicado a unos 100 kilómetros al noroeste de Harare.
Otras fuentes gubernamentales han abierto en los últimos días la posibilidad de que el entierro se atrase hasta que el cuerpo de Mugabe recorra las diez provincias del país, donde militantes de la gobernante Unión Nacional Africana de Zimbabue-Frente Patriótico (ZANU-PF) han manifestado sus deseos de despedirse de su líder.
Este sábado, el sobrino y portavoz de la familia Mugabe, Leo, reveló a la agencia estatal de noticias, New Ziana, que su tío, a quien describió como «un héroe entre héroes», murió como un hombre amargado y con una salud muy debilitada tras su renuncia forzosa.
Pese a su fama de dictador sin escrúpulos, que liberó a su país para después convertirlo en su propio feudo, en bastantes países de África Mugabe es todavía venerado como un luchador icónico por la libertad y contra el dominio colonial blanco.
En general, su régimen, que duró desde la independencia del Reino Unido en 1980 hasta su derrocamiento en 2017, se caracterizó por la represión de sus opositores, las elecciones de dudosa credibilidad, la falta de libertades para su pueblo y una total ruina del Estado zimbabuense.