Llega a Venezuela un pesquero atracado en España por embargo
EFE
El buque pesquero Brago, del Estado venezolano, llegó este miércoles al puerto de la entidad de La Guaira, después de navegar más de 20 días desde Galicia, en el noroeste de España, donde estuvo varios años atracado debido al embargo preventivo que pesaba sobre la embarcación, por concepto de créditos marítimos
«Hoy estamos viendo cómo es posible que -gracias a- toda la política de nuestro presidente Nicolás Maduro (…) es posible tener a esta hermosa embarcación de aquí en el puerto de La Guaira, embarcación que viene desde el puerto de Vigo», dijo el ministro de Pesca, Juan Laya, al canal estatal VTV.
La embarcación, que llegó «en perfectas condiciones», fue recibida también por las autoridades marítimas del país y llegó acompañada de marineros españoles que volverán pronto a su país, según explicó el ministro.
«Podemos decir también que esta embarcación fue transformada en un buque sardinero (…) vamos a poder llegar a los trenes sardineros para ayudar a nuestra pesca artesanal, para llevar una mayor cantidad de sardina a nuestro pueblo venezolano», agregó Laya.
Además dijo que le hicieron otras dos transformaciones al agregarle un «carrete para pescar atún» y una máquina de hielo.
El pasado 29 de abril, la Embajada de Venezuela en España informó que el barco zarpó el día 27 del puerto español de La Coruña (noroeste), para reincorporarse a la flota de la Empresa Socialista Pesquera Industrial del Alba (Pescalba).
El retorno del buque, de acuerdo con la embajada, se inscribe en «el proceso de protección y recuperación de activos que lleva adelante el país» suramericano.
El barco fue entregado por autoridades de España al Gobierno de Venezuela en un acto en el muelle de La Coruña, con la participación del cónsul general de Venezuela en la cercana ciudad de Vigo, Martín Pacheco, en la misma región española de Galicia.
Brago fue construido en astilleros de la región española de Asturias (norte) en 2007 para la pesca de sardina y para enfriamiento y en 2010 fue adquirido por Pescalba para incorporarlo a su flota pesquera en aguas del Caribe.
En 2015 un juzgado mercantil de la ciudad gallega de Pontevedra notificó a Pescalba una medida de embargo preventivo que pesaba sobre el buque por concepto de créditos marítimos, lo que obligó al barco a permanecer atracado sin actividad en el muelle público de Vigo hasta finales de 2019.
Tras años de disputas legales, la Justicia española autorizó el regreso del buque a Venezuela.
El pesquero fue reparado en su totalidad en el astillero de la ciudad gallega de Ferrol, donde le realizaron trabajos de mantenimiento en dique y le dotaron de equipos de alta tecnología para la navegación y la adecuación a los nuevos métodos de pesca.