Liberan en Cuba a Tania Bruguera tras detención por protestar contra decreto
EFE
La artista y activista cubana Tania Bruguera fue liberada este lunes en La Habana tras permanecer varias horas detenida en una estación policial supuestamente por tratar de participar en una protesta pacífica contra un nuevo decreto del Gobierno de Cuba que regula el sector artístico.
Otros dos creadores que fueron detenidos este lunes por el mismo motivo -Michel Matos y Amaury Pacheco- siguen arrestados, y hay dos más -Luis Manuel Otero y Yanelys Núñez- que se encuentran en paradero desconocido desde que anoche salieron de su casa para asistir a la protesta que iba a celebrarse ante el Ministerio de Cultura, aunque sus compañeros dan por hecho que están presos.
La coordinadora de la Campaña contra el Decreto 349, la actriz Iris Ruiz, informó a Efe de la liberación de Tania Bruguera, quien estuvo retenida en la estación policial de Diez de Octubre y tiene previsto dirigirse esta misma noche al Ministerio a preguntar dónde están el resto de sus compañeros detenidos.
Según Ruiz, los detenidos acordaron antes de comenzar la protesta iniciar una huelga de hambre y sed si eran detenidos.
Los arrestados forman parte de un amplio grupo de artistas contrarios al Decreto 349, que entra en vigor el próximo día 7 y que para muchos creadores se trata de una herramienta de potencial censura.
El punto más polémico de la normativa es el que obliga a que los artistas estén adscritos a una institución cultural del Estado, a la que deben solicitar permiso expreso para poder actuar, exponer y comercializar su trabajo.
Iris Ruiz explicó que no ha podido hablar aún con Tania Bruguera, ya que «le bloquearon el teléfono», pero supo de la liberación por la hermana de la artista, Déborah Bruguera.
También denunció que ella ha recibido varias inspecciones a lo largo de esta jornada, primero del departamento de Vivienda y luego de la Empresa Eléctrica, y que durante el fin de semana inspectores del Ministerio del Interior interrogaron a sus vecinos para saber si se ocupa de sus seis hijos.
Ahora, Ruiz teme que las autoridades la obliguen a desalojar con su familia la vivienda que ocupan desde hace siete años, y a la que se trasladaron porque estaba abandonada.
El Gobierno cubano, mientras, negó la semana pasada que el polémico Decreto sea una herramienta de censura y adujo que es un «avance para detener la oleada globalizadora y sus imitaciones nacionales» y «el retroceso de la calidad del consumo cultural».
Las infracciones a la nueva normativa conllevan multas de diversa cuantía, confiscación de instrumentos, cancelación de espectáculos y/o suspensión de licencias.
La organización Amnistía Internacional ha denunciado que la nueva ordenanza «contravendría no solo el derecho a la libertad de expresión de quienes desarrollan actividades artísticas en Cuba, sino también el derecho de toda persona a buscar y recibir información e ideas de toda índole».
En noviembre pasado también el departamento de Estado de EE.UU. se pronunció en contra del decreto y pidió, por boca de la nueva secretaria adjunta de Estado de EE.UU. para Latinoamérica y el Caribe, Kimberly Breier, quien pidió al Gobierno de La Habana «deshacerse de esta vergonzosa ley·.
El Gobierno cubano, por su parte, considera a los críticos del 349 «enemigos de la Revolución» que «han manipulado y han orquestado una campaña en la que lo presentan como un ataque inexistente a la libertad de creación», según una representante del Ministerio de Cultura.