Lele Pons sobre su nuevo pódcast: «Para mí es muy importante sentirme útil»
EFE
Lele Pons acaba de cumplir 24 años, pero la creadora multimedia, cantante y conductora venezolana reconoce que de vez en cuando, al oír un comentario de un fan joven o pensar en todo lo que ha logrado en sus siete años de carrera, tiene una sensación muy conocida por todos los que están en la adultez.
«Me siento vieja», reconoció Pons en una entrevista exclusiva con Efe en la que habló del camino que ha recorrido desde que se convirtió en la creadora con más seguidores de la difunta red social Vine y que la ha llevado a estrenar este miércoles en Spotify su primer pódcast, «The Secret Life of Lele Pons».
«Cuando pienso que empecé a los 17 años y sigo en esto me siento vieja. Cuando los fans más jóvenes me preguntan qué es Vine, no lo puedo creer, pero al mismo tiempo me encanta ver cómo mi trabajo ha ido evolucionando para ayudar», dijo.
«Para mí es muy importante sentirme útil. Sentirme que estoy ayudando a la gente», expresó la artista, quien está llevando esa misión a su pódcast, en el que recibe llamadas de fans que le revelan secretos que les están complicando la vida.
«Ya hemos grabado varios episodios y la gente me ha contado cosas muy complicadas. Algunas me han conmovido, pero otras me han dejado con la boca abierta sin saber qué decir», admitió Pons, quien mencionó una llamada en la que un joven le contó que había dejado embarazada a una muchacha, quien resultó ser su prima.
«Yo no sabía ni qué decirle. No soy terapeuta, pero traté de hacerlo sentir mejor, pobre. Le dije que hablara con la familia y explicara que él no sabía quién era ella», indicó todavía sin poder creer lo complicado de la situación.
El pódcast, que presentará dos llamadas cada semana, es producido por Shot Studios, la empresa que representa a Pons, una artista que cuenta con 41 millones de seguidores en Instagram, 12,7 millones en TikTok y cerca de 17 millones de suscriptores en YouTube, donde lanzó este año la primera edición de «The Secret Life of Lele Pons».
PRIMERAS CONFESIONES
Las conversaciones incluidas en el pódcast son totalmente anónimas. «Ni yo sé quiénes son los que me cuentan sus cosas. Por eso creo que se sienten más cómodos», indicó la creadora.
También ayudó, en su opinión, el que ella haya comenzado con las confesiones.
En su serie en YouTube, Pons ha hablado de sus dificultades de salud mental por sufrir de síndrome de Yourette y trastorno obsesivo compulsivo, así como de la relación con su padre, quien reveló que era homosexual cuando ella era pequeña.
«La reacción de la gente a todo eso fue mejor de lo que me esperaba. Me han escrito jóvenes y padres contando cómo los he ayudado a entenderse en familia. Eso me hace sentir increíble», dijo.
«(Me hace sentir) menos sola y es lo que le quise transmitir a los que me llamaron, que aunque creamos que lo que nos pasa es único, todo el mundo está viviendo o ha vivido algo muy complicado», manifestó al explicar cómo la experiencia la motivó a hacer el pódcast y asociarse con Spotify.
UNA GENEROSIDAD COMPLICADA
Pons, con solo 17 años, comenzó como cualquier otra adolescente a hacer pequeñas viñetas de comedia en Vine, que originalmente solo dejaba subir videos de seis minutos.
Sus ideas eran tan originales y divertidas que pronto se convirtió en la creadora más popular de la red, al punto de que sus seguidores la acompañaron a Instagram cuando la plataforma cerró y ahora también la siguen en TikTok.
«Cuando empecé a ver que la gente me seguía sentí una gran responsabilidad, que no ha hecho más que crecer», manifestó la artista.
Antes, desde que abría los ojos, comenzaba a pensar en qué podía crear para entretener a la gente. «Ahora, desde que no tengo a mis papás a mi lado todo el tiempo y tengo más ingresos, tengo más libertad y me encanta dar regalos y hacer cosas más complicadas», indicó.
En ese sentido, la artista venezolana también adelantó prepara su regreso a la música para principios de septiembre, con una colaboración que -promete- «les va a encantar a todos».
«Ya tenemos reto de TikTok y mucho más», cerró. EFE
