Las playas de Benidorm, España, listas para reabrir por parcelas
EFE
Las playas de la turística localidad española de Benidorm, en la costa mediterránea, reabrirán al público en los próximos días divididas en parcelas de cuatro por cuatro metros para asegurar el distanciamiento social obligado por la Covid-19.
Miles de visitantes británicos, principalmente, y también españoles, muchos de ellos de Madrid, disfrutan cada verano de estos arenales, que en condiciones normales pueden acoger a unas 40.000 personas, pero que este verano verán reducido drásticamente su aforo.
Además de la división en parcelas, el uso de la tecnología será «fundamental» para establecer el control de las playas, los accesos a las mismas y la seguridad de los bañistas.
La nueva normativa afectará también a los horarios de las playas, que abrirán doce horas diarias, y se podrían establecer turnos si fuera necesario para evitar las aglomeraciones, según indicaron fuentes del ayuntamiento.
Antes del inicio de la pandemia, la ocupación hotelera de Benidorm en la segunda quincena de febrero, era del 80%, una cifra por la que la patronal de hoteles ha enviado un mensaje de «tranquilidad» en un escenario «como el que se está viviendo actualmente».
Acostumbrada a tener altos niveles de ocupación durante todo el año, incluso en los meses invernales dado su clima cálido, la ciudad ha mostrado desde marzo una estampa muy alejada de la habitual.
La pandemia del coronavirus ha dejado muy tocado a un municipio cuya industria turística es la razón de su éxito y existencia, con miles de visitantes nacionales y extranjeros cada año.
La primera consecuencia de la epidemia fue la cancelación de reservas, la repatriación de unos 35.000 viajeros, el cierre de los hoteles y alojamientos, y la paralización absoluta de los negocios que viven de la presencia de británicos fundamentalmente. EFE