La «tropa» de militares que acompañará a Bolsonaro en el Gobierno de Brasil
EFE
El presidente electo de Brasil, Jair Bolsonaro, cumplió su promesa de campaña y ejercerá el poder a partir del 1 de enero con un Gabinete cívico-militar en el que destacan varios miembros de alto rango de las Fuerzas Armadas.
Además del vicepresidente electo, el general en la reserva Hamilton Mourao, y del propio Bolsonaro, quien es capitán también en la reserva, cinco ministros de un total de veintidós son oficiales de las Fuerzas Armadas
Un número igual al de los ministros de origen castrense del Gobierno del general Humberto de Alencar Castelo Branco, quien participó en el Golpe de Estado de 1964 e inauguró el régimen dictatorial que se extendería por dos décadas hasta 1985.
Además, otros cuatro ministros han estudiado o trabajado en el Ejército.
Bolsonaro, un nostálgico de la dictadura, ha sumado a su causa a oficiales de amplia experiencia en el comando de tropas tanto en Brasil, como en el exterior a través de misiones de paz de la ONU, en países como Haití o el Congo.
Además, varios de ellos pasaron por la misma escuela militar donde se graduó Bolsonaro, la de Agulhas Negras, en la localidad de Resende, en Río de Janeiro, entre ellos Mourao.
Considerado un general de línea dura, el vicepresidente electo dice lo que piensa sin miedo a la controversia. En medio de la crisis por el juicio político que desembocó en la destitución de la entonces presidenta Dilma Rousseff, se mostró a favor de una «intervención militar» en caso de que el «caos» se instalase en Brasil.
Mourao ya ha sido desautorizado en alguna ocasión por el propio Bolsonaro y ahora es el blanco de ataques por parte del presidente venezolano, Nicolás Maduro, quien le ha calificado de «loco» y «cobarde».
La lista de ministros la encabezan los generales de la reserva del Ejército Fernando Azevedo e Silva, que estará al frente de la cartera de Defensa, Augusto Heleno Ribeiro (Gabinete de Seguridad Institucional) y Carlos Alberto dos Santos Cruz (Secretaría de Gobierno).
Azevedo e Silva es el que tiene un perfil más político. Ha servido en los tres poderes del Estado y para diferentes gobiernos. Fue jefe del Estado Mayor del Ejército y nombrado Autoridad Pública Olímpica para coordinar la seguridad durante los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro 2016.
Cuando fue llamado por Bolsonaro trabajaba como asesor del actual presidente de la Corte Suprema, José Antonio Dias Toffoli.
Augusto Heleno Ribeiro cuidará de la seguridad del presidente y tendrá bajo su mando la Agencia Brasileña de Inteligencia.
Llegó a ser barajado como candidato a vicepresidente de Bolsonaro. Fue comandante militar de la Amazonía y dirigió la misión de paz de la ONU en Haití.
En una reciente entrevista para una radio local, Ribeiro afirmó que «los derechos humanos son, básicamente, para humanos derechos».
Posteriormente, explicó esa declaración en un programa de TV Globo y afirmó que si hay que «canalizar los esfuerzos» en proporcionar derechos humanos en un país como Brasil, con «limitaciones», pues es «aún económica, moral y socialmente debilitado», lo haría para el «ciudadano» trabajador.
«Entre el ciudadano que trabaja, sale de casa a las seis de la mañana, vuelve a las diez de la noche, encara un transporte público terrible, sufre todos los tipos de limitaciones en su vida diaria, él tiene mucho más derecho a ser pleno de derechos humanos que el sujeto que es bandido que está atracando en medio de la calle», completó.
Carlos Alberto dos Santos Cruz, quien formó parte de las misiones de paz en Haití y en el Congo y fue secretario de Seguridad en el Gobierno del actual presidente Michel Temer hasta que en junio pasado pasó a ser consultor de la ONU, será el puente entre el Gobierno y los estados y municipios, así como con el Congreso.
De la Fuerza Aérea Brasileña, Bolsonaro llamó al teniente coronel de la reserva Marcos Pontes, quien será ministro de Ciencia y Tecnología. Pontes es hasta ahora el único brasileño que ha viajado al espacio, donde permaneció diez días en 2006 gracias a una misión de la NASA.
El único representante de la Marina es el almirante aún activo Bento Costa Lima Leite de Albuquerque, quien asumirá el despacho de Minas y Energía. Trabajó como observador militar de las Fuerzas de Paz de la ONU en Sarajevo (Bosnia-Herzegovina) y Dubrovnik (Croacia).
Comandante de diferentes submarinos a los largo de su carrera, fue director general de Desarrollo Nuclear y Tecnológico de la Marina.
Además, tuvieron formación militar Wagner Rosario, quien permanecerá al frente de la Contraloría General, y Tarcisio Gomes Freitas, titular de Infraestructura. Ambos llegaron al rango de capitán del Ejército, como Bolsonaro.
Luiz Mandetta, futuro ministro de Salud, se desempeñó como médico del Hospital General del Ejército, con el grado de teniente, y el colombiano Ricardo Vélez Rodríguez dirigirá la cartera de Educación tras ser profesor de la Escuela de Estado Mayor del Ejército.