La reina Isabel es posible que no vuelva a la actividad pública
Agencias
Isabel II, de 94 años, podría permanecer en autoaislamiento “por meses” y nunca volver a los deberes reales de primera línea. Su Majestad, de 94 años, que ha suspendido todos sus compromisos públicos mientras reside con su esposo, el príncipe Felipe, en el Castillo de Windsor, no podrá retomar sus funciones públicas debido al riesgo de contagiarse COVID-19 por un largo tiempo.
El posible retiro público de Isabel II se da a conocer en momentos en que el primer ministro Boris Johnson estableció un “plan de salida” tentativo de tres etapas e instó al país a volver a trabajar en un discurso televisivo a la nación desde Downing Street.
El biógrafo real Andrew Morton, de 66 años, en declaraciones a The Sun afirmó que temía que la monarca, cuyo calendario no se reanudará hasta el otoño boreal, no regrese a sus tareas habituales y que probablemente sea vista en mensajes grabados pero no en público. Es la ausencia más larga de la monarca de sus deberes oficiales en su reinado de 68 años.
“Es terriblemente triste, pero no creo que pueda reanudar su trabajo habitual. El virus COVID-19 no desaparecerá pronto y estará entre nosotros durante meses, si no años», afirmó Morton. “Sería demasiado arriesgado para la Reina encuentros públicos», agregó.
El autor, que escribió “Diana: su verdadera historia en 1992”, agregó que si bien la realeza disfrutaba reunirse con el pueblo, tales encuentros representan un gran riesgo tanto para ella como para el príncipe Felipe, que cumplirá 99 años el próximo mes.
Este lunes, una portavoz del Palacio de Buckingham informó que la monarca continúa “ocupada”, y mantiene audiencias semanales con el Primer Ministro por teléfono y sigue recibiendo su maletín rojo diario con documentación oficial del Gobierno para mantenerla informada de la marcha del país.
Agregaron que Su Majestad se mantiene en contacto con el resto de la familia real por teléfono y videollamadas.
The Sunday Times informó que el Palacio de Buckingham permanecerá cerrado por primera vez desde 1993, aunque la reina permanezca en Windsor, con eventos como “Trooping the Colour” y las fiestas en el jardín de Su Majestad cancelados.
Buckingham abrió sus puertas al público por primera vez hace 27 años debido a un incendio devastador en el castillo de Windsor, que luego se reparó polémicamente con millones de las arcas públicas. Fue el peor año vivido por la reina. Las llamas pusieron el broche fatídico al año en el que el desastroso matrimonio del príncipe Carlos y Lady Di fue expuesto en la biografía de Andrew Morton. El 24 de noviembre de 1992, Isabel II pronunció un discurso para conmemorar sus cuatro décadas en el trono. Fue memorable por un frase que usó en latín: “annus horribilis” (“año horrible”). Sin embargo, su marido Felipe, los duques de Sussex y su hijo Andrés le hicieron pasar un 2019 para el olvido a la titular de la corona británica.
Isabel II y duque de Edimburgo han estado aislados en Windsor con un personal reducido desde el 19 de marzo. La monarca generalmente regresa de Windsor a su residencia central de Londres en mayo antes de su descanso anual en Balmoral, Escocia, en julio.
En estos momentos con la renuncia de Harry y con la ausencia de Carlos de Inglaterra tras contraer COVID-19, es el príncipe William y su esposa Kate Middleton quienes están a cargo de representar a la Reina . Desde su casa de campo situada en el condado de Norfolk, en Reino Unido, los duques de Cambridge mantienen conversaciones vía Zoom con profesionales de la salud y personal en la primera línea en la lucha contra con el coronavirus.
Infobae