La pandemia elevó costos funerarios y deja a familias endeudadas
800noticias
Vivir cuesta siempre, morir deja deudas enormes y hace dar carreras a los ciudadanos de a pie, cuando se trata de dar el último adiós a sus familiares fallecidos. La pandemia del COVID-19 elevó y consolidó los costos funerarios, siendo dolarizados y dejando a un lado su valor en bolívares, reseña La Prensa Táchira.
En la actualidad se utilizan urnas de MDF en su mayoría, pues su precio es el más económico, ostentando el valor mínimo entre los 160 y 200 dólares(Más de 425 millones de bolívares, equivalente a 42,5 salarios mínimos, o en su defecto 560 mil pesos).
El equipo de La Prensa del Táchira, conversó con los representantes de dos empresas fúnebres de larga trayectoria en la región, precisando la alta valía que sustentan las compañías del último adiós a la vida terrenal, sin embargo, prefirieron mantener sus identidades en resguardo por tema de seguridad laboral y jurídica.
Para diciembre de 2019 un servicio funerario tenía un valor aproximado de 5 millones de bolívares, lo que permite colocar sobre la balanza el aumento de dicho servicio.
«Las velaciones de la noche y el día se acabaron, ahora solo se vela al fallecido máximo tres horas y con la familia, para evitar propagación del virus», dijo uno de los consultados.
Según los datos aportados por ambas compañías, el beneficio de la cremación se equiparó en cuanto al entierro en cementerios, una cremación oscila los 135 dólares, incluyendo el alquiler de urna, preparación, estadía, traslado y oficios de ley.
«Por cada diez fallecidos, los familiares de siete logran cancelar a través de divisas que ingresan de los venezolanos migrantes, el resto se resuelve pidiendo colaboraciones, vendiendo objetos de valor o empeñando propiedades para despejar rápidamente la deuda», indicó otro de los entrevistados.
Los costos en el cementerio municipal de San Cristóbal rondan entre 180 y 200 dólares, mientras en el cementerio Metropolitano El Mirador alcanza los 350 dólares, en cuanto a servicio básicos.
Una velación de lujo puede costar 800 dólares, utilizada solo por familiares de ingresos económicos muy altos, adquiriendo ataúdes de madera fina o latón cuya oferta inicia su precio a partir de los 300 dólares.
Los consultados revelaron que existen formas de entorpecer las ofertas del sector, encontrando personal que ofrece menores costos para ganarse un dinero extra en sus funciones, lo que en ocasiones evita el uso de las funerarias ya establecidas.
Los gerentes de empresas de servicios fúnebres manifestaron preocupación por la falta de atención a los trabajadores de este sector, pues son la última escala de manipulación de muertos por COVID-19 y no han recibido respuesta ante las propuestas de recibir la vacuna.
Con información de La Prensa Táchira
