La odisea de comprar dos cauchos en Maracaibo (Fotos)

Redacción 800Noticias. «Es una situación sumamente frustrante y despiadada la que estamos sometidos los Venezolanos», así se expresó  Marina Fernández, quien  desde hace un mes acude a una tienda de venta de cauchos ubicada  en la avenida Universidad con Santa Rita en Maracaibo.

«Cualquier cosa pueden suceder desde un arrebaton de un hampón que transite por el lugar hasta desmayos de los que en este país tenemos la necesidad de adquirir un caucho a precio justo».  así lo dijo Jesús Molina otra de las personas que acude  al negocio de cauchos, para tratar de comprar un neumático.

En la odisea se desayuna, se almuerza,  se consume todo el líquido que se pueda, para así tratar de sobrevivir al calor y los empujones que se van a soportar  durante el tiempo en espera de  los llamados que hace el representante de la  intendencia para los «sorteos», donde la suerte juega un papel importante, pero también «la palanca», es decir un amigo que pueda ayudar para que ciertas personas salgan favorecidas.

Los pasos que hay que seguir para adquirir los  cauchos  con una sensación térmica 50 grados y un trato inhumano para cualquier ciudadano, son los siguientes:

1.-Pernotar al establecimiento todos los días mañana y tarde  para verificar si el camión que los distribuye llega al local.

2.- La llegada de los neumáticos «que para muchos de los que acuden todos los días  es un «milagro».

3.- Esperar que la mercancía  sea totalizada e introducida en el sistema del establecimiento.

4.- Verificar si el intendente de la prefectura asignada tenga el tiempo para ir a la hora que pueda.

5.- Pedirle a  Jesús, a  la «Chinita» los que son católicos sino a su Dios que haya llegado el neumático indicado para tu vehículo

6.- Someterse a un sorteo como si se  tratará de un juego «bingo».

Todo esto en un lapso de 8 horas,  contando el que llega desde 8 hasta 5 de tarde. Soportando el calor, estress, la frustración, para salir en el «sorteo», sacando de una caja tu cédula y solamente llevándose dos cauchos ya que eso es lo que te permite el establecimiento para adquirir. En caso de salir sorteado para comprar otro par deberá esperar más de un mes.

Por supuesto,  para los ganadores durante el «sorteo», es alegría hasta abrazos y gritos son escuchados de la felicidad, mientras que para que no salen los embarga una situación de impotencia y tristeza el acudir a esos lugares.