«La niña del napalm», recibe tratamiento reconstructivo en Miami
EFE
Kim Phuc, la llamada «niña del napalm» cuya foto tomada hace 50 años corriendo desnuda y despavorida se volvió icónica, llegó este martes al sur de Florida (EEUU) para recibir un tratamiento reconstructivo por las afecciones que padece, según medios locales.
Phuc, que ahora tiene 59 años, estuvo en el sur de Florida este martes recibiendo un tratamiento láser reconstructivo final para las heridas que sufrió hace cinco décadas.
De acuerdo con la televisión Local 10, la dermatóloga Jill Waibel brindó el tratamiento pro bono en su oficina del suroeste de Miami-Dade.
«No podía creerlo», dijo Phuc. «50 años después, todavía necesitaba ayuda», destacó la activista.
«La razón principal por la que buscó tratamiento fue el dolor. Ella estaba en un 9 de 10 (en la escala de dolor)», recogió el citado medio.
La doctora Waibel ejerce como dermatóloga certificada y se especializa en dermatología médica, cirugía láser cutánea y dermatología cosmética para todas las edades, según la web del Instituto de Dermatología y Láser de Miami, donde la especialista trabaja como directora médica y propietaria.
La doctora Waibel, asimismo, es conocida por ser pionero en tratamientos con láser utilizados para ayudar a veteranos heridos y víctimas de quemaduras y traumatismos como Phuc, asociada a una de las imágenes más reconocibles de la guerra de Vietnam.
«Estoy tan emocionada», dijo Phuc antes de su tratamiento».
Utilizada como símbolo propagandístico contra la brutalidad del Ejército estadounidense, Kim Phuc, la llamada «niña del napalm» es, 50 años después de que fuera tomada en una foto corriendo desnuda, un personaje incómodo para el régimen vietnamita por la manera en que huyó del país en busca de libertad.
La foto de la pequeña Kim Phuc llorando dolorida por el napalm que corría su piel aquel 8 de junio de 1972 se puede contemplar hoy en el Museo de la Guerra de Ho Chi Minh (antigua Saigón), donde se exhiben las atrocidades cometidas por los soldados estadounidenses, pero durante veinte años la imagen más icónica del conflicto estuvo desaparecida.
La fotografía era una de las más destacadas del museo en los años 80, cuando, según cuenta la escritora canadiense Denise Chong en el libro «La niña de la foto», la propia Kim Phuc se sorprendió al toparse con ella en el recinto, pero desapareció después de que Phuc huyera de Vietnam y pidiera asilo en Canadá en 1992.