La isla que solo duró ocho meses: ni llegó a estar en los mapas
ABC
Los cambios climáticos están ocasionando fenómenos meteorológicos extremos. Unido a la pérdida de masa de hielo en la Antártida, en otras zonas del planeta se registran graves inundaciones, frecuentes olas de calor o sequías, lo que está provocando, entre otras cosas, el aumento del nivel de los océanos y, como consecuencia, inundaciones y erosión en las zonas costeras.
Algo así sucedió en 2017 frente a las costas de Carolina del Norte, en EE.UU., donde de la noche a la mañana surgió «Shelly Island» o la Isla de las Conchas, un banco de arena con forma de semicírculo que, dependiendo de las mareas, podía medir hasta 16 km de largo. Esta isla se convirtió rápidamente en un nuevo atractivo turístico no exento de peligros, tal y como alertaba Dave Hallac, responsable de la reserva, quien advertía de las fuertes corrientes en la zona así como de la presencia de tiburones.
Ocho meses después de su aparición, una serie de fuertes tormentas afectaron a la zona y causaron la redistribución de la arena. Tal y como apareció Shelly Island desapareció cual isla fantasma sin llegar siquiera a aparecer en los mapas locales.