¿La Inteligencia Artificial podrá desplazar a los desarrolladores?
Fuente: tynmagazine.com
Los desarrolladores temen que su trabajo ya no sea necesario a partir del terreno que está ganando la Inteligencia Artificial. Esto quedó demostrado en un reciente informe hecho por Eva Data, en el que se encuestó a más de 550 desarrolladores de software, y en donde dejaron claro que su mayor temor ya no está en perder el trabajo frente a algún colega o en que sus programas no tengan los buenos resultados que esperaban. Ahora su futuro se ve opacado por la Inteligencia Artificial.
En el informe, cuando se le preguntó que identificaran lo que más les preocupa respecto a sus carreras, el 29,1% citó que «yo y mis esfuerzos de desarrollo se sustituyen por la inteligencia artificial”.
Esto fue significativamente más preocupante que los problemas de la plataforma, tales como las sus plataformas queden obsoletas, lo que quedó en segundo lugar, con el 23%, o que las nuevas plataformas que están desarrollando no tengan éxito, lo que terminó en tercer lugar, con el 14%.
Respecto a esto, un reciente estudio de la Universidad de Oxford, denominado El Futuro del Empleo, advierte que el trabajo de los ingenieros en software pronto podrían volverse computarizados. Los avances en Machine Learning ya permiten optimizar, mediante algoritmos, determinados diseños seleccionados. Según dicho estudio, los sistemas pueden también detectar errores con una fiabilidad que muy improbable que lleguen a alcanzar los humanos.
«Otra dimensión de este hallazgo es que más de las tres cuartas partes de los desarrolladores pensaron que los robots y la inteligencia artificial serían un gran beneficio para la humanidad, pero un poco más del 60% pensó que podría ser un desastre», dijo Janel Garvin, CEO de Evans Data.
«La superposición entre dos grupos muestra la ambivalencia que sienten sobre los albores de las máquinas inteligentes. Habrá beneficios maravillosos, pero también habrá algunos cambios negativos tanto cultural como económicamente hablando», finalizó.