La insólita justicia de Malawi que causa estupor e indignación en el mundo
Con información de BBC Mundo
A pesar de que Eric Aniva, un hombre VIH positivo, admitió que fue contratado para tener sexo con niñas, su sentencia solo responde al delito de «práctica cultural perjudicial».
Antes de ser conducido por la policía hacia su celda, Aniva dijo a la agencia de noticias AFP que no estaba preocupado por su encarcelamiento.
«Creo que recibiré una sentencia suspendida», declaró.
Tras un juicio de un día, el hombre de 45 años de edad fue encontrado culpable de ese delito, recogido en la sección 5 del Acta de Equidad de Género de Malawi, por violar la dignidad de las viudas al participar en un ritual de «limpieza sexual» y condenado a dos años de prisión.
Esta práctica fue proscrita hace unos años.
Conocido como el «hombre hiena de Malawi», Aniva fue arrestado en julio por una orden del presidente de ese país, Peter Mutharika, tras el escándalo internacional que se generó a partir de su entrevista con la BBC.
El presidente Mutharika había pedido que Aniva fuera procesado por tener sexo con niñas.
Como ninguna niña testificó en su contra, Aniva solo enfrentó una acusación por tener relaciones sexuales forzadas con mujeres que habían enviudado recientemente.
De las dos mujeres que ofrecieron evidencia, una dijo que tuvieron sexo cuando la costumbre no estaba prohibida y la otra declaró que pudo escapar antes de que el ritual de «limpieza sexual» comenzara.
Según la corresponsal de la BBC en el sur de África Karen Allen, este caso generó opiniones contrapuestas debido a que los rituales de iniciación y limpieza sexual están relativamente extendidos en algunas zonas del sur del país.
¿Rituales de limpieza?
En algunas áreas remotas del sur de Malawi es tradición que las niñas tengan relaciones con un trabajador sexual de pago, conocido como «hiena», una vez alcanzada la pubertad.
Los ancianos de los pueblos no consideran el acto una violación, sino un ritual de «limpieza».
Sin embargo, tiene el potencial contrario, el de ser una vía para propagar enfermedades.
«hiena» es un título tradicional que en varias áreas remotas del sur de Malawi se otorga a un hombre al que la comunidad paga para que lleve a cabo rituales de «limpieza» sexual.
En varios distritos, a este rito suelen tener que someterse mujeres que quedaron viudas o aquellas que sufrieron un aborto.
Sin embargo, en Nsanje, son las adolescentes quienes, después de haber tenido su primera menstruación, deben tener relaciones sexuales con la «hiena» durante tres días.