La inflación en Estados Unidos es la mayor en 13 años
EFE
La tasa de inflación continúa su sostenido auge en Estados Unidos a medida que la economía se reactiva tras la pandemia, y en junio el acumulado anual de alza precios al consumidor se ubicó en el 5,4 %, informó este martes la Oficina de Estadísticas Laborales (BLS).
El mes pasado el índice de precios al consumidor (IPC) en Estados Unidos subió un 0,9 %, aupado por el incremento en los de los coche usados (10,5%) y la gasolina (2,5%).
En los últimos tres meses la tasa interanual ha crecido del 4,2% en abril, al 5% en mayo y al 5,4 % en junio.
Esta última es la mayor desde verano de 2008.
En el último año, el precio de los coches usados ha subido un 45,2 %; el de la gasolina un 45,1%; y el de los billetes de avión un 24,2%, según el reporte dado a conocer hoy.
Si se excluyen los precios de alimentos y combustibles, los más volátiles, la inflación subyacente el mes pasado fue del 0,9%, y del 4,5 % en los últimos 12 meses, la cifra más alta de este indicador desde 1991.
FANTASMA DE LA INFLACIÓN
Este repunte de los precios al consumidor se conoce dos semanas antes de la próxima reunión de la Reserva Federal (Fed) de EE.UU. sobre política monetaria, y en medio de la creciente preocupación por la inflación a medida que la economía afianza la recuperación.
«Lo que esto realmente nos muestra es que las presiones inflacionarias se mantienen más fuertes de lo percibido y que van a estar con nosotros por un largo periodo de tiempo», dijo Sarah House, economista de inversión y empresas del banco Wells Fargo en una nota a clientes.
Si bien la mayoría de los economistas coinciden en que como consecuencia del levantamiento de las restricciones impuestas por la pandemia y la reapertura económica es normal observar alzas en los precios, la duda es si se trata de un repunte temporal u obedece a razones de fondo, lo que sería más peligroso.
REPUNTE TEMPORAL, SEGÚN LA CASA BLANCA
Para el Gobierno del presidente estadounidense, Joe Biden, las razones de este auge se encuentran en la reactivación económica a medida que el virus se contiene, y no ve motivos de preocupación.
Desde el consejo de asesores económicos de la Casa Blanca, Heather Boushey admitió tras conocerse el dato de junio que la inflación está aumentando, pero advirtió que «hay que mirar en profundidad los datos para entender lo que está ocurriendo».
«El precio de los coches, usados, nuevos y de alquiler, así como sus componentes, supusieron el 60 % del alza mensual total», dijo Boushey en un mensaje en Twitter, y apuntó que si se descuentan estas categorías junto a otras afectadas por los cierres de la pandemia «la subida en junio habría sido del 0,2%».
Aunque el presidente de la Fed, Jerome Powell, ha reconocido que se verán notables subidas de precios, ha subrayado que serán de carácter «transitorio», por lo que no prevé modificar los tipos de interés del banco central, actualmente entre el 0 % y el 0,25 % en lo que resta de año.
El banco central estadounidense elevó el mes pasado sus previsiones de crecimiento económico hasta el 7 % y de inflación hasta el 3,4 % para el conjunto de 2021.
Precisamente, mañana miércoles Powell comparecerá ante el comité de servicios financieros de la Cámara de Representantes para presentar su informe semestral de política monetaria, donde a buen seguro será interpelado por los congresistas ante esta fuerte subida de los precios en el país. EFE