La Fracción 16J explica por qué salvó su voto en acuerdo que declara usurpación de Maduro
NP
Este martes 15 de enero, la Asamblea Nacional aprobó un acuerdo para declarar la usurpación de Nicolás Maduro.
En ese acuerdo, la Fracción 16 de julio salvó su voto por considerarlo inconstitucional:
#15Ene Acompañamos la ruta del 233 desde su inicio. Hemos ratificado que @jguaido es el Presidente Encargado de la República, pero el Acuerdo aprobado en la #AN es insuficiente para su reconocimiento. Además, es inconstitucional pretender transferir sus atribuciones a toda la AN
— Bloque Parlamentario 16 de Julio (@fraccionAN16J) January 15, 2019
Argumentos del bloque parlamentario
El acuerdo nombra a la AN completa como presidente encargado de la República de Venezuela. Es decir, cada decisión ejecutiva la tendrán que tomar la totalidad de los diputados y no solo Juan Guaidó, cómo lo establece el artículo 233, qué dice:
«Cuando se produzca la falta absoluta del Presidente electo o Presidenta electa antes de tomar posesión, se procederá a una nueva elección universal, directa y secreta dentro de los treinta días consecutivos siguientes. Mientras se elige y toma posesión el nuevo Presidente o la nueva Presidenta, se encargará de la Presidencia de la República el Presidente o Presidenta de la Asamblea Nacional».
Por tanto, ese acto de es inconstitucional e ineficaz. La Presidencia de la República es un cargo personalísimo y en las actuales circunstancias, el único que puede asumir el cargo de presidente encargado es el presidente de la AN, Juan Guaidó.
La Fracción 16J está totalmente de acuerdo con decretar la «usurpación» y estamos haciendo toda la presión nacional e internacional necesaria para que Juan Guaidó se juramente a la brevedad posible, pero si Guaidó no asume la responsabilidad que tiene como responsable único del Ejecutivo, no habrá apoyo internacional efectivo.
Reconocemos y respaldamos a Guaidó, pero debe existir un acto de reconocimiento que le dé piso político y entonces proceda de una vez por todas a ejecutar actos de gobierno, como el nombramiento de los embajadores.
Salvamos nuestro voto porque la otra agenda deja a Maduro como presidente, usurpador o como se le califique, pero sin el contrapeso legal que genere el conflicto y las condiciones necesarias para avanzar finalmente a la transición.