La fiscal de la CPI acude a la ONU pese a que EE.UU. le retiró el visado
EFE
La fiscal jefe de la Corte Penal Internacional (CPI), Fatou Bensouda, compareció este miércoles ante el Consejo de Seguridad de la ONU, viajando a Nueva York a pesar de que Estados Unidos revocó este año su visado para entrar al país.
Aunque inicialmente se había especulado con la posibilidad de que Bensouda hablase al Consejo de Seguridad por videoconferencia, finalmente apareció en persona para dar cuenta de los avances de la investigación de la CPI sobre crímenes cometidos en Libia.
En abril, el tribunal con sede en La Haya confirmó que EE.UU. había revocado el visado a la fiscal, en medio de una escalada de la tensión entre Washington y la Corte.
Unas semanas antes, el secretario de Estado estadounidense, Mike Pompeo, había anunciado que su país iba a restringir los visados para entrar al país a cualquier persona de la CPI implicada en la investigación de supuestas violaciones de derechos humanos cometidas por EE.UU. en Afganistán o en otros lugares.
La Fiscalía de la Corte Penal Internacional pidió a finales de 2017 abrir una investigación en Afganistán por supuestos crímenes de guerra y lesa humanidad a manos de talibanes, autoridades de país y tropas estadounidenses.
Finalmente, el pasado 12 de abril, los jueces del tribunal rechazaron la petición de la Fiscalía al considerar que «las perspectivas de una investigación y un procesamiento exitosos son extremadamente limitadas».
Pese a ver revocado su visado, Bensouda pudo estar este miércoles en Nueva York para ofrecer ante el Consejo de Seguridad un informe sobre la situación en Libia, algo que hace regularmente.
Los acuerdos entre EE.UU. y la ONU permiten habitualmente que personas sancionadas por Washington puedan entrar en el país para acudir a la sede de la organización internacional.
Bensouda, que no habló a los medios, aprovechó su intervención ante el Consejo de Seguridad para volver a hacer una advertencia a los grupos armados libios que actualmente combaten en los alrededores de Trípoli.
La fiscal de la CPI urgió a todos ellos a respetar las normas del derecho internacional humanitario y les avisó de que quienes cometan crímenes de guerra o los permitan pueden ser perseguidos desde La Haya.