La curiosa atracción turística de un templo indonesio
Si de experiencias curiosas se trata, hay una que siempre circula entre los que se aventuraron a volar hasta la isla de Bali, en Indonesia, y conocer sus templos: en el Pura Uluwatu, que se eleva por sobre un acantilado de 76 metros sobre el océano Índico, hay unos monos “benditos” –y esto no es sarcasmo– que roban billeteras.
De hecho, también el reloj, el sombrero, los lentes o la cartera: cualquiera sea el objeto que a ellos les parezca interesante, buscarán arrancharlo de su dueño, para luego correr y disfrutar de él en la copa de los árboles. La impunidad de los monos, más allá de las advertencias y los cuidados que de hecho tiene el personal del templo, se debe a que estos son seres bendecidos por los dioses indios, dentro de este centro espiritual a media hora de Nusa Dua, la playa que alberga la mayor cantidad de hoteles de cuatro y cinco estrellas.
Según la mitología indonesia, Ramma habría contraído matrimonio con un mono justo en ese lugar; es por ello que el complejo de Uluwatu se ha convertido en un centro artístico que rememora el amor de los dioses al atardecer, en la matriz de la espiritualidad entre los nueve templos que hay en la isla y en el lugar donde los monos se han convertido en el principal benefactor de una dinámica turística que mueve más de tres millones de viajeros al año.
Fuente: El Nacional