Sospechan cuál sería la causa de muertes de tiburones ballena
EFE
El número de tiburones ballena ha disminuido en los últimos años en muchos lugares pero no está del todo claro por qué. Ahora, un nuevo estudio señala que las colisiones de estos animales con los grandes barcos se subestiman enormemente.
El estudio observacional, publicado en la revista PNAS, se ha realizado a partir de datos de rastreo por satélite de casi 350 tiburones ballena. El equipo de investigación lo han dirigido científicos de la Asociación de Biología Marina del Reino Unido y de la Universidad británica de Southampton.
Dado que estos animales pasan mucho tiempo en las aguas superficiales y se reúnen en las regiones costeras, los expertos han teorizado que las colisiones con los barcos podrían estar causando importantes muertes en los tiburones ballena, pero hasta ahora no había forma de controlarlo.
Científicos de 50 instituciones de investigación y universidades internacionales siguieron los movimientos de los tiburones ballena y los barcos en todo el mundo para identificar las zonas de riesgo y las posibles colisiones.
El equipo trazó un mapa de los «puntos críticos» de los tiburones que se solapaban con las flotas mundiales de buques de carga, petroleros, de pasajeros y de pesca -los tipos de grandes buques capaces de golpear y matar a un tiburón ballena- para revelar que más del 90 % de los movimientos de los tiburones ballena «caían bajo la huella» de la actividad naviera.
Además, estos pasaban casi la mitad de su tiempo en aguas superficiales a profundidades similares a las de los buques.
El estudio demostró que las transmisiones de las marcas de los tiburones ballena finalizaban con más frecuencia de lo esperado en las rutas marítimas más transitadas, incluso cuando se descartaron fallos técnicos.
El equipo llegó a la conclusión de que la pérdida de transmisiones se debía probablemente a que los tiburones ballena eran golpeados, muertos y se hundían en el fondo del océano.
La investigadora de la Universidad de Southampton Freya Womersley declara: «La industria del transporte marítimo, que nos permite abastecernos de una gran variedad de productos cotidianos de todo el mundo, puede estar causando el declive de los tiburones ballena, que son una especie enormemente importante en nuestros océanos».
Son gigantes oceánicos de movimientos lentos que pueden llegar a medir hasta 20 metros de longitud y se alimentan de animales microscópicos llamados zooplancton.
Los tiburones ballena ayudan a regular los niveles de plancton del océano y desempeñan un papel importante en la red alimentaria marina y en la salud de los ecosistemas oceánicos.
El profesor David Sims, fundador del Proyecto de Movimiento Global de Tiburones, apunta: «Increíblemente, algunas de las marcas que registran la profundidad, así como la ubicación, mostraban a los tiburones ballena moviéndose hacia las rutas de navegación y luego hundiéndose lentamente en el fondo marino a cientos de metros de profundidad».
«Es triste pensar que se han producido muchas muertes de estos increíbles animales en todo el mundo a causa de los barcos sin que nos demos cuenta para tomar medidas preventivas», dice Sims.
En la actualidad no existe ninguna normativa internacional para proteger a los tiburones ballena de las colisiones con los barcos.
El equipo, en el que también está el español Carlos Duarte, de la King Abdullah University of Science and Technology (Arabia Saudí), afirma que esta especie se enfrenta a un futuro incierto si no se toman medidas pronto. EFE