Kuczynski sufre primera baja en su gabinete tras salvarse de la destitución
EFE
El presidente de Perú, Pedro Pablo Kuczynski, aceptó hoy la renuncia del ministro del Interior, Carlos Basombrío, la primera baja en su gabinete tras superar el pedido de destitución planteado por la oposición en el Congreso.
Basombrío acudió hoy a la casa del mandatario para reiterar su renuncia al cargo, presentada la semana pasada cuando se conoció que una empresa de Kuczynski había dado asesoría financiera a la brasileña Odebrecht entre 2004 y 2007, por la cual cobró dividendos.
El ministro del Interior informó, en su cuenta de Twitter, que la renuncia fue aceptada hoy y que el traspaso se realizará después de las fiestas de fin de año.
Basombrío es uno de los ministros que le propuso a Kuczynski renunciar al cargo, a raíz del contrato firmado con Odebrecht cuando era ministro del Gobierno de Alejandro Toledo (2001-2006), según reveló hoy el semanario «Hildebrandt en sus trece».
De acuerdo con el periódico, otros cuatro integrantes del gabinete estaban convencidos de que Kuczynski no podía mantenerse en el cargo por presuntamente haber mentido sobre su relación con Odebrecht.
No obstante, en su defensa ante el Parlamento, el jefe de Estado insistió en que su empresa Westfield Capital era gestionada por su exsocio Gerardo Sepúlveda cuando firmó contrato con la constructora brasileña y que él no sabía de ese acuerdo hasta ahora.
La ministra de la Mujer, Ana María Choquehuanca, dijo hoy a los periodistas que «el presidente seguramente va a hacer un anuncio en los próximos días» sobre otros cambios en el gabinete ministerial, ante la división que generó la crisis por el pedido de destitución.
«Como ministros siempre tenemos la carta de renuncia en la mano», agregó Choquehuanca al ser consultada sobre si conoce de otras renuncias al Ejecutivo.
La destitución de Kuczynski fracasó en el Parlamento por los 21 votos de abstención emitidos, entre otros, por diez legisladores de la mayoría opositora Fuerza Popular encabezados por Kenji Fujimori, el hijo menor del condenado expresidente Alberto Fujimori.
La actitud de este grupo de legisladores ha sido considerada una traición por su partido y el portavoz de la bancada, Héctor Becerril, les instó a que renuncien.
Becerril afirmó que el propio «Alberto Fujimori llamó a 10 congresistas para que votaran a favor de la corrupción, a cambio de su indulto», al explicar la posición del grupo encabezado por Kenji Fujimori.
El menor de los Fujimori ya estaba apartado de su bancada, a raíz de una serie de críticas a las acciones promovidas por el partido liderado por su hermana Keiko Fujimori e insistía en que su objetivo es el indulto a su padre, sentenciado a 25 años de cárcel.
La ministra de la Mujer y también legisladora del oficialismo reiteró hoy lo dicho por la primera ministra, Mercedes Aráoz: el Gobierno no negocia indultos con el fujimorismo.
«Nosotros no negociamos indultos, no hemos negociado nada, particularmente nuestra bancada nunca ha tenido conocimiento de eso porque no ha existido», subrayó.
La primera ministra informó el jueves que este año se han presentado 45 pedidos de indulto a favor de Alberto Fujimori, pero 39 ya fueron rechazados por no cumplir con los requisitos.
Por su parte, el legislador independiente Roberto Vieira, que renunció al oficialismo, opinó que si Kuczynski ofreciera un indulto a Fujimori «sería parte de una reconciliación que necesita el país».
Vieira agregó que hay que respetar a «la nueva bancada de Kenji» en el Congreso.
Precisamente, el jefe de Estado invocó a la reconciliación y reconstrucción en el país, tras la votación en el Parlamento que rechazó el jueves su destitución.
En su alocución ante el Congreso, Kuczynski también pidió disculpas porque, según dijo, debió «ser el primero en advertir las dificultades para sanar las heridas, tras la contienda democrática» de 2016, en las que venció por estrecho margen a la actual líder opositora, Keiko Fujimori.