Kroos reitera su deseo de terminar su carrera en el Real Madrid - 800Noticias
800Noticias
Deportes Fútbol

800 Noticias | EFE

El centrocampista internacional alemán Toni Kroos reiteró su deseo de terminar su carrera en el Real Madrid, en una entrevista con la edición alemana de la revista GQ en la que habla no sólo de fútbol, sino también de cómo ha vivido el confinamiento en España y de sus planes a largo plazo.

«Quiero terminar mi contrato aquí (en el Real Madrid, que vence en tres años) y entonces tendré 33 años y varias opciones. Quedarme aquí, hacer otra cosa o terminar mi carrera. Pero mi deseo es retirarme aquí, en el Madrid», dijo Kroos.

KROOS Y EL CONFINAMIENTO

Buena parte de la conversación de Kroos con GQ estuvo dedicada a cómo vivió en confinamiento.

«Para mí no fue para nada grave estar encerrado en casa. A la larga lo que más había extrañado en los últimos años por los muchos viajes era estar en casa y con la familia», señaló.

«Sin embargo, era una sensación distinta a la que uno puede tener al final de la carrera porque todo estaba bajo una mala estrella y porque mucha gente sufría con la situación», añadió

Por vivir a las afueras de Madrid, Kroos solo percibió de lejos y a través de las noticias lo que pasaba en la capital española durante la pandemia y señaló que es consciente de vivir en una situación privilegiada con su mujer y sus hijos.

«Naturalmente somos extremadamente privilegiados porque tenemos una casa grande y con jardín, lo que probablemente hubieran querido millones de personas que tienen tres niños lo mismo que nosotros pero viven en un piso en la ciudad y no podían salir. Para nosotros la situación fue perfectamente soportable», subrayó.

Durante el confinamiento, Kroos estuvo ocupado con los niños y sin mucho tiempo de probar con cosas nuevas porque, según él, eso de ser padre con tres hijos en casa es «un trabajo de tiempo completo aunque sea el más hermoso del mundo».

«Uno no puede poner a los niños en una esquina y decir ahora hago algo para mi», comentó.

Sin embargo, durante el parón Kroos descubrió un nuevo deporte, el boxeo, que practicó con un saco de arena y una aplicación para mantenerse en forma.

«Al comienzo pensé que podía hacer algo más y fuí superando un nivel de programa detrás del otro. Al comienzo uno se siente bien, pero al día siguiente sentía que se me caían los brazos y los dedos estaban tan hinchados que casi no podía ponerme el anillo de matrimonio», dijo

El confinamiento fue soportable para Kroos por su carácter y también por su situación, que le ahorra preocupaciones económicas.

«No tengo que andar por la calle todos los días ni ir a un café por las noches. Eso es algo que no hago tampoco en tiempos normales cuando todo está abierto. Por eso el cambio para mí no fue difícil. Además no tengo que enfrentarme a preocupaciones económicas, a diferencia de muchos otros que temen por su trabajo o su negocio», explicó.

KROOS Y LA SERENIDAD

En Kroos, la serenidad en el campo es una de las características más destacadas y en la entrevista le preguntaron si alguna vez se pone nervioso en un terreno de juego.

«En el campo muy rara vez porque a través de los años he visto que la serenidad ayuda en muchas situaciones. También los éxitos dan cierta tranquilidad y saber que a uno no le puede pasar gran cosa. Alguien me ha dado eso. En todo caso nadie de mi familia, si me atengo a lo que cuentan de lo nerviosos que están durante los partidos frente al televisor», aseguró

Los nervios, no obstante, le vienen a Kroos en ocasiones fuera del campo.

«Pero naturalmente hay momentos fuera del fútbol en los que me pongo nervioso. Por ejemplo durante el nacimiento de mis hijos. Ahí no puedes influir ni ayudar y tienes que agarrarte a la esperanza de que todo salga bien», manifestó.

LA PUNTUALIDAD

Kroos suele ser visto como alguien típicamente alemán, aunque el cree que en su país pueden considerar que se ha vuelto un poco español. Pero hay algo que sigue manteniendo. Su defensa de la «absoluta puntualidad».

«Sigo dándole valor a la puntualidad, lo que aquí (en España) se toma de una manera más laxa. Aquí, llegar diez minutos tarde es ser puntual. Cuando llegó a una charla técnica tres minutos antes de que empiece soy el primero. En Alemania, si llego tres minutos antes estoy entre los últimos», dijo.

Síguenos por @800noticias