Keiko Fujimori califica de abuso la prisión preventiva contra sus asesores
EFE
La líder opositora Keiko Fujimori, quien cumple quince días en prisión preventiva por un presunto lavado de de dinero, calificó este viernes de «abuso» la misma medida dictada este jueves para Ana Herz y Pier Figari, sus dos asesores más cercanos.
«Están hoy presos por trabajar a mi lado, por ser mis amigos y colaboradores más cercanos. Esto es un abuso y un exceso que no tiene nombre», señaló en un mensaje de Twitter la excandidata presidencial.
Herz y Figari fueron recluidos este viernes en la cárceles limeñas de Santa Mónica y Miguel Castro Castro, respectivamente, donde cumplirán, en tanto no se dicte una medida contraria, los tres años de prisión preventiva que ordenó sobre ellos el juez Richard Concepción Carhuancho.
La prisión para mujeres de Santa Mónica, en el distrito limeño de Chorrillos, es también la cárcel donde está recluida de Fujimori desde el 1 de noviembre por orden del mismo juez Concepción Carhuancho.
Desde la ejecución de la medida, diversos congresistas de Fuerza Popular señalaron que la justicia está «politizada» y que su líder es «una presa política», argumento que Fujimori volvió a esgrimir este viernes desde la cárcel al señalar que su detención y la de sus asesores es «una estrategia perversa de criminalización total de un partido político».
«Estamos de acuerdo con una investigación y proceso judicial, pero con las garantías mínimas y fundamentales de un debido proceso», aseveró.
Asimismo, lamentó que además de Figari y Herz también se haya ordenado la prisión preventiva por tres años a Vicente Silva Checa, señalado por la Fiscalía como otro asesor de la hija del expresidente Alberto Fujimori.
«El fiscal dice que era mi asesor en la sombra, lo cual es falso. Él y su familia sufren hoy este atropello por las mentiras de un colaborador que no han sido ni podrán ser corroboradas», agregó Fujimori.
Tanto a Fujimori como a Figari, Herz y Silva Checa se les imputa ser presuntamente la cúpula de una organización criminal enquistada en el partido fujimorista Fuerza Popular, que supuestamente lavó dinero para financiar la campaña presidencial de Keiko para las elecciones presidenciales de 2011.
El juez Concepción Carhuancho llegó a esta determinación tras las declaraciones de un testigo protegido que señaló que las decisiones más importantes de Fuerza Popular eran tomadas por Fujimori, Figari, Herz y Silva Checa.
Entre el dinero ocultado bajo esta modalidad puede estar el millón de dólares que Odebrecht afirmó haber donado a la campaña de Fujimori en 2011, aparentemente desde la cuenta con la que pagó sobornos en una docena de países de Latinoamérica.
El lavado se realizó aparentemente con una contabilidad ficticia en la que se simularon múltiples donaciones de personas particulares a las que les pidieron que prestaran sus nombres.