Kate Middleton y su “agotadora” experiencia como profesora de sus hijos
Agencias
En Reino Unido los niños aún no han retomado sus clases presenciales y la población se encuentra confinada, por lo que muchos hogares británicos son estos días una mezcla de oficina, aula, patio de recreo y comedor. Es el caso, por ejemplo, de Anmer Hall, la residencia de Norfolk en la que el príncipe Guillermo se encuentran pasando el confinamiento con sus tres hijos, los príncipes George, Charlotte y Louis, mientras continúan su agenda por medio de videollamadas. Una experiencia “agotadora” de la que ayer la duquesa de Cambridge tuvo ocasión de desahogarse en una reunión que mantuvo con un grupo de padres.
“Es agotador”, dijo Kate cuando la directora de un colegio de Londres participante en la reunión pidió que cada uno de los padres escogiera una palabra para describir la tarea de educar a sus hijos desde casa.
“Hay cosas que como padres tenemos que hacer día a día, pero supongo que durante el confinamiento hemos tenido que asumir los roles de otras personas de nuestra comunidad que nos ayudaban”, se explicó luego la duquesa. “Hemos tenido que convertirnos en profesores”, especificó Kate Middleton, quien también reveló que la asignatura con la que tiene más problemas a la hora de ayudar a sus hijos George y Charlotte con los deberes es la de matemáticas. “-5”, fue la puntuación que le dio a su destreza con los números.
Otro de los nuevos roles que ha tenido que asumir Kate Middleton es la de cortarle el pelo a sus tres hijos. “Para espanto de mis hijos, durante el confinamiento me he convertido en peluquera”, bromeó.
A pesar de que Kate Middleton se quejó del desafío que supone «tener que hacer malabarismos con el trabajo, la vida en familia, los deberes escolares y todo lo demás», lo cierto es que los duques de Cambridge tienen el privilegio de contar con un espacio extra en el que trabajar sin ser interrumpidos por sus hijos.
Según se supo la semana pasada, la reina Isabel II les ha cedido un espacio en Sandringham House como despacho, y fue allí precisamente desde donde ayer Kate Middleton celebró su videollamada.
Vestida con una chaqueta verde de Massimo Dutti y un jersey del mismo color, su atuendo combinaba con el sofá y las plantas que decoran la habitación, donde Kate parece sentirse ya tan cómoda que ha instalado varias fotografías de su álbum familiar. La duquesa de Cambridge lucía también unos pendientes dorados de Daniella Draper con colgantes de tréboles y una medalla de oro de la misma firma.
Ya lo dijo ayer: “Para nuestros hijos, también es importante que cuidemos de nosotros mismos”.