Juntos pero no revueltos: Hoteles españoles planean cómo reabrir tras la cuarentena
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El alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, anunció este miércoles que el Ayuntamiento está trabajando en un plan propio de desescalada que en hostelería incluye por ejemplo ampliar las terrazas de bares y restaurantes, reducir aforos o instalar medidas de protección como mamparas.
Manuel Gil, empresario madrileño, ya ha instalado tabiques separadores en uno de sus negocios para tratar ver la viabilidad de la última de las medidas planteadas.
Según explicó en una entrevista concedida a Telemadrid, se trata de separadores de metacrilato. «Tenemos varios modelos y los precios oscilan entre los 600 y los 700 euros, aunque tenemos otros más baratos», señala el hostelero.
Estos elementos, que separan a los clientes sin impedir que se vean, garantizarían los dos metros de distancia y la seguridad de todos.
Una solución temporal, por la que ya ha mostrado interés Italia, que está ideada para que los hosteleros puedan seguir abriendo sus puertas tras el confinamiento y que no pierdan clientes por el temor de estos a contagiarse de COVID-19.
«Permiten estar juntos pero no revueltos», relata Gil a la cadena. «Se trata de que la hostelería pueda abrir cuanto antes».
