Juan Andrés Mejía: El control cambiario es la mayor fuente de corrupción en Venezuela
Nota de Prensa
El diputado a la Asamblea Nacional, Juan Andrés Mejía, se pronunció ante la derogación de la Ley de ilícitos cambiarios, realizada de forma ilegal e inconstitucional por la ilegitima Asamblea Nacional Constituyente ANC, aseverando que el control cambiario es la mayor fuente de corrupción en Venezuela.
“En el país sigue existiendo un control cambiario y, según entendemos, continúa también el dólar preferencial, esto origina gran parte de la corrupción de los últimos años. Esta medida que pretende establecer la ilegítima Asamblea Nacional Constituyente, además de ser ilegal, es insuficiente porque no resuelve el problema y deja muchas interrogantes como las implicaciones y de qué manera va a implementarse”.
Mejía resaltó que es una medida ilegal e inconstitucional, porque la Ley de ilícitos cambiarios fue un estatuto promulgado por el antiguo parlamento y es la Asamblea Nacional vigente el único organismo que tiene la competencia de reformar y derogar leyes en Venezuela.
“Es a través del control cambiario que altos funcionarios del Gobierno se han enriquecido a costa del pueblo venezolano, con la mirada cómplice del régimen. No sabemos quiénes, ni cómo van a operar ahora estas casas de cambio y lo más importante es que es una medida aislada, que no va a resolver el problema económico en país”.
El miembro de la Comisión de Finanzas del parlamento, aseguró que es necesario lograr verdaderos cambios en el país, recuperar la industria petrolera y dar oportunidades a los venezolanos para emprender. Asimismo señaló que se debe respetar la Constitución y las instituciones del país, incluyendo a la legítima Asamblea Nacional.
“Necesitamos recuperar la confianza y el Estado de derecho. No hay manera de que la población pueda confiar en Nicolás Maduro, ni en este régimen, por lo tanto se requiere un cambio profundo, que incluya la salida de la dictadura y la creación de un nuevo Gobierno, que fortalezca la industria petrolera, que invierta en el campo y dé a las universidades la oportunidad de innovar en tecnología, para que Venezuela se convierta en un país moderno del siglo XXI”.